Los ultras del Betis mostraban su apoyo al jugador ucraniano Roman Zozulya, tras el incidente con la afición vallecana que rechaza al jugador acusado de tener ideas neonazis. Los jugadores béticos también condenaban este “linchamiento” al jugador y defendían que Zozulya no es nazi sino patriótico. Zozulya se mostraba muy agradecido con los aficionados, que le esperaban tras su llegada a Sevilla con pancartas, y posaba ante las cámaras con ellos.