El Bernabéu convertido en un fortín para disputar el partido con más protección de la historia. Pero la vigilancia se extrema. Para llegar al estadio habrá que pasar tres controles y en cada puerta de acceso se colocará un detector de metales. Por ello se recomienda ir con tiempo, para evitar aglomeraciones, y no llevar mochilas. La policía ocupará cada rincón con un dispositivo de hasta 1.000 efectivos de la Policía y más de 1.400 vigilantes privados. Estos días las unidades caninas rastrearán los alrededores. Hasta el momento nada hace saltar las alarmas y las autoridades han lanzan un mensaje de tranquilidad y serenidad.