Multado pero no suspendido. Ese es el dictamen del Comité de Ética de la FIFA sobre Ángel María Villar. Tras varias semanas de deliberaciones, el actual presidente de la Real Federación Española de Fütbol deberá pagar una multa de 23.000 euros por, según el comunicado de la FIFA, “no comportarse de acuerdo a las normas generales de conducta aplicables” durante las investigaciones sobre las candidaturas de los Mundiales de 2018 y 2022. A través de un comunicado de la propia Federación, Villar reconoció que estaba muy contento porque finalmente se limpiaba su nombre después de tantas insinuaciones y filtraciones.