Rafa Nadal ha pasado con ciertos apuros a cuartos de final del torneo de Río de Janeiro. Le costó ganar al asturiano Pablo Carreño, tanto que para hacerse con el primer set necesitó una hora y quince minutos. La humedad también fue un hándicap. Por cierto, en la sala de prensa le preguntaron por un ligero cambio de peso que no le gustó nada. "No hay cambios en mi vida, ni en mi preparación. Tengo el mismo peso de siempre", dijo el tenista de Manacor.