Exprimen sus motos hasta sacar fuego por el tubo de escape. Este fin de semana doscientos mil moteros tomarán Cheste, un escaparate para lucirse encima de la moto y quemar ruedas. Allí se celebra el final de fiesta del Gran Premio de Motociclismo que podría verse complicado por el mal tiempo que se espera en la Comunidad Valenciana aunque, en ningún caso, los posibles chaparrones aguarán la diversión de los aficionados a las dos ruedas.