El técnico azulgrana analizó el choque en los primeros minutos de conferencia ante los medios, pero el resto de su intervención pivotó sobre el estado anímico de este Barça que ha dicho adiós a la Champions. Por eso, el entrenador, en la víspera del duelo ante el Granada, admite que "es difícil que el equipo esté totalmente recuperado tras quedar eliminado de los cuartos de final de la Liga de campeones". "Pero no hay tiempo para lamentos", ha explicado. "Quería que tocara menos pelota, pero que interviniera de manera más decisiva. No creo que le afecten las críticas, futbolistas tan decisivos como él viven en estos vaivenes. Es muy difícil ser Messi, no sólo jugar al fútbol, vivir siendo él debe ser muy difícil", ha dicho.