El árbitro del partido Granada-Real Madrid, Carlos Clos Gómez, recoge en el acta del encuentro que el jugador del equipo granadino Dani Benítez le lanzó una botella de medio litro de capacidad "llena de líquido" que le produjo en el pómulo izquierdo "una pequeña inflamación" por la que no precisó asistencia médica. La acción del jugador del Granada se produjo tras las expulsiones de sus compañeros Moisés y Siqueira por haber llamado al colegiado "ladrón" y "sinvergüenza", respectivamente.