Alemania, principios del siglo XX. La joven artista Paula Becker está decidida a seguir sus propias normas. A sus 24 años rechaza las convenciones establecidas y explora su estilo único, mientras florece en la comunidad artística de Worpswede, donde entabla amistad con la artista Clara Westhoff y el poeta Rainer Maria Rilke. Al casarse con el pintor Otto Modersohn, cree haber encontrado a su alma gemela creativa, pero cinco años de vida doméstica hunden el espíritu de Paula. Decidida a liberar su imaginación y autorrealizarse, Paula emprende sola un viaje a París.