Etty, su marido y sus hijos Evert, Erwin, Manuel y Eva son una familia perfectamente normal que, con los años, ha desarrollado una manera un poco disfuncional de relacionarse unos con otros. Entonces, de repente, la encarnación de la perfección entra en sus vidas convertida en Veit, un estudiante de intercambio alemán. Con su llegada, la duda, la inseguridad, el miedo y el deseo invaden la familia Van End. Durante las dos semanas de estancia de Veit, los cinco miembros de la familia comienzan a reinventarse, ya que se sienten cada vez más alejados de si mismos y de los demás. Pero al final, no es la perfección lo que están buscando.