Riggan Thomson espera que encabezando una nueva y ambiciosa obra en Broadway va a lograr, entre otras cosas, dar una nueva vida a su moribunda carrera. En muchos sentidos es un iniciativa profundamente insensata, pero el antiguo superhéroe del cine tiene grandes esperanzas de que este ardid creativo le va a legitimar como artista y va a demostrar a todos, incluido él mismo, que es algo más que una vieja gloria de Hollywood. Al aproximarse la noche de estreno de la obra, el actor principal de Riggan resulta herido en un insólito accidente durante los ensayos y tiene que ser sustituido rápidamente. A sugerencia de la primera actriz, Lesley, y ante la insistencia de su mejor amigo y productor, Jake, Riggan contrata de mala gana a Mike Shiner, un elemento peligroso que garantiza la venta de entradas y una elogiosa crítica de la obra. Mientras se apresta a debutar en escena, Riggan debe vérselas con su novia y coprotagonista, Laura; con su hija, recién salida de un tratamiento de rehabilita