Dwight es un treintañero sin techo que vive en su coche, un destartalado Pontiac azul. Deambula por la ciudad y sobrevive recogiendo botellas en la playa, hasta que un día su rutina se trastorna al enterarse de una terrible noticia. Esto le lleva a tomar una decisión descabellada y a volver a la casa de su infancia para llevar a cabo una extraña venganza.