Cuando se rompieron las fronteras en la Unión europea, en el año 1993, dos trabajadores de las aduanas de Francia y Bélgica, intuyen que van a perder su trabajo (situado entre las poblaciones de Courquain y Koorkin). El belga Ruben Vandervoorde odia a los franceses, al igual que toda su familia. Su homólogo del otro lado de la frontera le menosprecia, pero está enamorado en secreto de la hermana de éste. Para sorpresa de todos comenzarán a trabajar juntos, vigilando los caminos de pueblos en un coche de aduanas internacionales: un viejo Renault 4.