Bosnia y Herzegovina, 1991. Los comunistas han caído y Divko Buntic regresa a la pequeña ciudad donde creció para reclamar la casa familiar. Después de vivir exiliado 20 años en Alemania, Divko aparece con su llamativo Mercedes rojo, su novia Azra, joven y sexy, su gato negro de la suerte llamado Bonny y los bolsillos llenos de marcos alemanes. Los billetes y su primo Ivanda, recién proclamado alcalde "democrático" ayudan a Divko a desalojar a la fuerza a Lucija y a Martin, su hijo de 20 años. Martin y Lucija, que han tenido suerte de no ser encarcelados después de su violento enfrentamiento con la policía durante el desalojo, son realojados en un pequeño y destartalado apartamento municipal. Una vez bien instalado en su antigua casa, Divko intenta llegar hasta Martin, el hijo que nunca conoció. Invita a Martin a vivir con él y Azra, su futura esposa. Cuando Lucija se entera, se pone furiosa y teme perder a su hijo si se va con su padre. Martin tranquiliza a su madre, pero el joven rad