Ser adolescente solitario y fatalista es el estigma de George. El joven tras años de no hacer amistad con nadie conocerá a una chica guapa en la que encontrará un alma gemela. Sally conseguirá que haga cosas que nunca habría pensado, como ir a una fiesta o tener una mejor amiga de la que enamorarse. El joven que ha pasado todos sus años de instituto sin hacer nada, incluso en arte su asignatura favorita, encontrará un modelo de conducta en Dustin un joven pintor que fue a su instituto y se convierte en su mentor. En ese momento verá clara su vida como artista en la que Sally se convertirá en su musa... si halla la forma de confesarle sus sentimientos.