Cambio de hora 2025: cómo afecta a tu mascota y cómo minimizar su impacto

La próximidad del cambio de hora -tendrá lugar durante la madrugada del sábado 29 de marzo al domingo 30- hace que muchos ya se estén preparando para afrontar un cambio en sus rutinas, en el sueño y hasta en su estado de ánimo. Sin embargo, pocas veces nos detenemos a pensar en cómo este ajuste impacta a quienes comparten nuestra vida de forma silenciosa y leal: nuestras mascotas.

El cambio de hora, diseñado para aprovechar mejor la luz solar, supone una alteración brusca en la rutina de los animales de compañía, sobre todo en lo que se refiere a los horarios de comida, paseos o actividades diarias. Aunque sus relojes biológicos no entienden de normativas gubernamentales ni de ajustes del reloj, los efectos pueden hacerse notar en su comportamiento y bienestar.

La importancia de las rutinas para las mascotas

Los animales domésticos se rigen por rutinas estables. A lo largo del tiempo, perros y gatos interiorizan los hábitos de sus cuidadores: la hora de despertarse, de comer, de pasear o de descansar. Por eso, cuando llega el cambio de hora, el desajuste puede desorientarlos, generar ansiedad o modificar temporalmente su patrón de conducta.

Estudios recientes han comenzado a analizar el impacto de los cambios de hora en los animales. Aunque la mayoría de investigaciones sobre el horario de verano se ha centrado en los humanos, nuevas evidencias apuntan a que el cambio de hora también tiene implicaciones para nuestras mascotas.

¿Cómo afecta el cambio de hora a los perros?

Las alteraciones pueden notarse en aspectos sutiles. Algunos perros pueden mostrar inquietud si se retrasa la hora de salir a pasear o comer. Otros pueden volverse más apáticos por la confusión horaria. Cada animal reacciona de forma diferente, y los cambios pueden ser leves o más evidentes según su sensibilidad o nivel de dependencia emocional con sus cuidadores.

Los expertos en comportamiento animal señalan que el cambio de hora puede desencadenar una serie de síntomas en los perros, incluyendo irritabilidad, cansancio, ansiedad y estrés. La alteración en los horarios de alimentación y paseo puede generar confusión y frustración, especialmente en aquellos perros que están acostumbrados a una rutina predecible. Además, el hecho de que anochezca más temprano puede exacerbar la ansiedad, especialmente en aquellos perros que sufren de miedos nocturnos o ansiedad por separación.

Estrategias para minimizar el impacto del cambio de hora

Por suerte, los efectos del cambio de hora en los perros suelen ser temporales y se resuelven en unos dos o tres días, a medida que los animales se adaptan a los nuevos horarios. Sin embargo, existen estrategias que podemos poner en práctica para facilitar esta transición y minimizar el malestar de nuestros compañeros caninos:

• Ajustes graduales: adelanta o retrasa los horarios de alimentación, paseo y descanso en incrementos de 15 o 30 minutos cada día, permitiendo que el perro se adapte de manera gradual al nuevo horario.
• Mantener la calma y la paciencia: evita cambios bruscos en la rutina, proporciona un ambiente tranquilo y seguro, y ofrece refuerzo positivo cuando el perro se comporte de manera deseada.
• Prestar atención a las señales de malestar: si notas que tu perro está más irritable, cansado o ansioso de lo normal, consulta con un veterinario o un especialista en comportamiento animal.

El impacto del cambio de hora no se limita únicamente a los perros. Otros animales domésticos, que dependen de la luz artificial para regular sus ciclos biológicos, también pueden experimentar efectos negativos. Es importante prestar atención a las necesidades específicas de cada especie y tomar medidas para minimizar el estrés asociado con el cambio de hora.