Tamara Falcó ha aparecido de nuevo en El Hormiguero después de su ruptura con Iñigo Onieva. Lo dicho por la marquesa de Griñón eclipsó por completo la visita de Álvaro Morte y China Suárez, quienes la habían precedido en el plató.

Después de muchos rumores, Tamara Falcó acudió al programa El Hormiguero, donde trabaja y no evitó en ningún momento hablar de su ruptura con Onieva, por lo que empezó con la amenaza de su sobrino: "Dice que le va a aplastar King Kong", bromeó.

El presentador Pablo Motos desveló que todo el torbellino que se inició antes de la ruptura de la pareja formada por Tamara e Íñigo comenzó cuando el equipo del programa acudió a una fiesta organizada por uno de los compañeros en su casa. Allí se dio cuenta de que comenzó a circular un vídeo, aunque decidió no verlo y seguir pasándolo bien.

Motos, que también estaba allí, se dio cuenta de lo que podía pasar y por eso estuvo "un poco apartado", pero ella creía que todo se debía a que no se integraba con el resto de la gente. En un primer momento se defendió diciendo que esas imágenes eran del año 2019, una versión que fue desmontada horas después gracias a Sálvame.

El viernes pasado Tamara siguió creyendo a su entonces novio y por eso decidió acudir a una boda con él. El consejo que le dio su madre Isabel Preysler fue que no hablase, motivo por el que fue Onieva quien tomó la iniciativa ante la prensa.

Después de la boda, Tamara Falcó recibió llamadas y avisos, incluidos los de su madre, de que había más vídeos de Onieva con otras chicas, fue entonces cuando empezó a perder la confianza en su prometido. Tras decenas de conversaciones con personas cercanas, el sábado decidió irse de casa: "Dejé el anillo en la mesa, cogí a mis perros, metí todo como pude en el bolso, vino una amiga a por mí y me llevó a casa de mi madre".

Falcó recordó esos momentos: "Con todo eso era imposible volver con él. Tuve que retratar a una persona con la que sabía que no me iba a casar. Es una mentira y una decepción. Y una mentira sobre una mentira. Fue muy complicado", dijo la marquesa. Pese a todo se queda con las cosas buenas que le han pasado con la ruptura: "No hubo un momento en el que estuviera sola".

"Al final la divina providencia tenía un plan. Me acordé de mi familia, de los divorcios… Es algo que he pasado yo", decía recordando el pasado amoroso de su madre. "La relación tenía que ser basada en la confianza. Puedes ir al mismísimo infierno... Pero esto es como un espejo al que le has dado un martillazo", afirmó.

Falcó dejó caer que hay muchas más mentiras alrededor de su relación y de la vida de Iñigo Onieva: "Hay muchísimo más de lo que yo no tenía ni idea. Gracias a mis amigos por haberme hecho ver con quién me iba a casar, porque me he librado.. Esto ha sido un engaño", concluyó Tamara Falcó.