Un vídeo difundido por El Mundo muestra a varios concursantes de la tercera temporada de 'La Isla de las Tentaciones' saltándose las medidas sanitarias para evitar la propagación del coronavirus al acudir durante la celebración en la noche del pasado jueves, 4 de marzo, de una fiesta en una conocida sala de ocio nocturno de Madrid. Se puede observar cómo los asistentes no cumplen las medidas de seguridad, como el distanciamiento social, el número de asistentes y el nulo uso de la mascarilla.

Según indica el citado medio, en el vídeo -que circula por las distintas redes sociales- se muestra al menos cinco de los participantes del reality de Mediaset: Manuel, Cristian, Jesús, Álex y el canario Raúl, que estaban de fiesta superando "el número mínimo de personas por mesa fijado en cuatro en la capital española".

No es esta la primera polémica que se crea en Madrid por una fiesta en locales en los últimos meses en las que no se respetan las normas de seguridad. Además, hace varias semanas la Guardia Civil informó que está investigando un abuso sexual múltiple sufrido por una joven el día 14 en una fiesta ilegal en un chalé del municipio de Colmenarejo.

Los hechos ocurrieron en una vivienda alquilada para hacer un evento sobre el mundo del motor, pero al mismo llegaron hasta medio centenar de personas, algo que el dueño del chalé observó a través de las cámaras de seguridad. Entonces, llamó a la Guardia Civil, que desalojó la fiesta sobre las 22 horas de ese sábado. La mayoría de los asistentes no llevaba mascarilla ni respetaba la distancia de seguridad, teniendo en cuenta que ninguno era conviviente.

Días más tarde, una joven denunció, según ha adelantado el diario 'El Mundo', que en ese evento fue drogada y coaccionada a mantener relaciones sexuales no consentidas con varios hombres. En la fiesta había varias personas participantes en el programa televisivo 'La Isla de las Tentaciones', que no estarían entre los sospechosos. Al parecer, una chica contactó con la víctima en Instagram y quedaron en otro punto de la localidad, donde fue recogida para llevarla al chalet.

La Guardia Civil ha tomado ya declaración a varios invitados a esa fiesta y visionado las cámaras de seguridad, aunque de momento investiga un delito de abusos sexuales de varias personas y no de agresión sexual. A día de hoy no hay detenidos. La investigación sigue su curso y las diligencias se han declarado secretas.