El hipnótico baile que une a los amantes de la electrónica

Hay hitos que marcan las estaciones, como los grandes festivales de Farra, con ellos empieza el verano. Y ellos protagonizan alguno de los momentos memorables de la cultura musical en Tenerife. Ayer fue el turno para La Misa, que completó otro capítulo gigantesco lleno de diversión, la mejor música de vanguardia y nueve horas de baile ininterrumpidas.

La Misa es un acontecimiento en sí mismo. Edición a edición congrega a su indestructible legión de fieles. En esta ocasión bajo el reclamo PWASA, Airrica, Toman, Skryption, Miguelle and Tons, Drummer, Barbara Lago y Shalow Boy, una nueva muestra de lo más destacado de la escena dj internacional. Ellos pusieron la sintonía a una ecuación perfecta en la confluyen el buen clima, la buena organización y la ganas de fiesta.

Lo vivido ayer en Adeje volvió a encuadrarse dentro de lo superlativo. Dio igual el intenso calor de las primeras horas de la tarde. El que estuvo, disfrutó.

Nuevamente más de 10.000 personas acudieron al reclamo de una nueva muestra de sobresalientes djs de ámbito internacional y la secuencia siguió los pasos exitosos de ediciones anteriores.

Complicidad entregada al baile desde el mismo inicio de la tarde tejiendo entre cada uno de los presentes otra jornada histórica, un ambiente festivo desde el primer beat hasta el último.

La Misa es ese lugar soñado donde miles de almas se rinden ante el hechizo de la música. Allí, el ritmo se transforma en sonrisas, abrazos, brindis y gritos de alegría. Es una celebración colectiva que parece querer detener el tiempo, alargar el presente hasta fundirse con el mañana. Sólo el fin de la música cierra cada nuevo capítulo.

Cada momento vibra con intensidad, pero hay instantes que se elevan por encima del resto, como cuando PWASA se pone al frente y desata la euforia. Sin embargo, desde el primer beat hasta la última nota, La Misa mantiene intacta su esencia: la comunión entre música, baile y hermandad.

Así fue también en esta edición. El techno y el house, con sus sonidos profundos y envolventes, guiaron la experiencia de principio a fin, atrapando a los asistentes en una burbuja de presente absoluto, donde nada más importa.

Gracias al patrocinio de entidades como Turismo del Gobierno de Canarias, Turismo del Cabildo de Tenerife, Juventud del Gobierno de Canarias, Canariasviva.com y el Ayuntamiento de Adeje, La Misa se ha consolidado como uno de los referentes culturales y de ocio más importantes de Canarias.

Cada edición atrae a un público diverso: residentes de distintas islas, visitantes del continente y turistas que, al descubrir este festival, lo convierten en parte esencial de su experiencia en el Archipiélago. Por su escenario han pasado nombres de talla internacional como Carlos Cox, Mochakk o Marco Carola, dejando huella en el sur de Tenerife y situando a la isla en el circuito de los grandes festivales europeos.