SIN PERDER EL NORTE
Patrimonio del Norte en peligro de extinción
Un total de 11 inmuebles de gran valor histórico de Tenerife se encuentan en riesgo de desaparecer debido a su grave deterioro, denuncia la organización Hispania Nostra

Elevador de Aguas de La Gordejuela.
Marta Casanova
El territorio y el paisaje que nos rodea es fiel reflejo de nuestra historia. Nos habla de quiénes fuimos un día y constituye nuestro bien más preciado. Por tanto, el legado que dejaremos a las futuras generaciones depende en gran medida de nuestra sensibilidad por conservarlo en las mejores condiciones, aunque muchas veces resulte complicado y costoso.
Hispania Nostra es una asociación sin ánimo de lucro que nació en 1976 para poner en valor el patrimonio cultural y natural de toda España que en ocasiones ni nos damos cuenta de su existencia. Muros que esconden tesoros de la historia muchas veces por descubrir y que resulta necesario mostrar porque lo que no se conoce difícilmente se puede apreciar y mucho menos conservar. Son en definitiva los guardianes de nuestro patrimonio y se encargan de alertar sobre los riesgos inminentes ante el deterioro de muchos de estos valores.
En 2007 avanzaron en la identificación de determinados elementos del patrimonio cultural y natural a través de un semáforo que nos advierte de los riesgos de desaparición que corren muchos de ellos si no se actúa a tiempo. La denominada Lista Roja de Hispania Nostra es en definitiva una herramienta de participación social donde cualquier persona o asociación puede proponer la inclusión de un bien y un comité científico evalúa cada caso para determinar su incorporación. Aparte de esta Lista Roja, la citada asociación presenta también una Lista Verde con los lugares que han corrido mejor suerte y se encuentran ya fuera de peligro y una Lista Negra que recoge aquellos puntos que han desaparecido o cuyos valores se han alterado tanto que resulta imposible su recuperación.
Investigando en este listado me he encontrado con varios lugares del norte de Tenerife, incluidos por su estado de abandono y deterioro. Como dato curioso, de los 19 enclaves de Tenerife, once se ubican en la zona norte, desde Tacoronte hasta Icod de los Vinos. Un recorrido que he querido mostrar en esta sección para conocer un poco más nuestra historia. Algunos de ellos ni sabía que existían y conocerlos me ha permitido indagar un poco más en nuestros orígenes.
Elevador de aguas de la gordejuela (Los Realejos)
Este complejo industrial del siglo XX, conocido como La Gordejuela, fue una de las primeras instalaciones en utilizar energía eléctrica para elevar agua en Canarias. Actualmente se encuentra en estado de abandono y ruina, aunque ha sido reconocido como uno de los lugares abandonados más bellos del planeta.
El Elevador de Aguas de Gordejuela fue construido en 1903 por la casa Hamilton, en la antigua ubicación del molino de Juan de Gordejuela y junto a las cascadas que llevan su nombre. La Casa Hamilton era una empresa británica que en 1902 adquiere la totalidad de las acciones de la sociedad de aguas Gordejuela y dan comienzo las obras de la estación de bombeo para elevar el agua hasta la cima del acantilado, situada a unos 200 metros sobre el nivel del mar. La instalación fue diseñada por el ingeniero militar José Galván Balaguer, apoyado por León de Torres y León Huerta. La obra marcó un hito en su tiempo por haberse instalado en su interior la primera máquina de vapor de la Isla de Tenerife. Tuvo una gran importancia en los inicios del siglo XX para la elevación del agua hasta el Valle de la Orotava, aprovechando el agua que fluía por los manantiales de la zona.

Hacienda de San Clemente. / Hispania Nostra
Hacienda de San Clemente (Santa Úrsula).
El conjunto agropecuario y residencial se levanta en el siglo XVI por la familia Grimón. Durante el siglo XVII el linaje se vincula a la familia Nava creando la unión Nava-Grimón y llegando a ser marqueses de Villanueva del Prado, de Acialcázar y de Torrehermosa, así como señores de la aldea. En la hacienda habitaron los marqueses y otros familiares a lo largo de la historia, como Claudio Grimón y Alonso de Nava, empleándola principalmente como vivienda veraniega o haciendo uso de ella en tiempos de vendimia. En el año 1788, Alonso de Nava fue delegado para dirigir el proceso de aclimatación a la península de las especies vegetales que provenían de América, como tagaré, chembe y tíndalo, realizando para ello experimentos en la hacienda.

Molino de la Piñera / Hispania Nostra
Molino de la Piñera (Los Realejos)
Fundado en 1922 por Daniel Pérez Cabrera, este molino se utilizó para la molienda de grano y la producción de gofio, aprovechando la fuerza del agua. En 1930 se adaptó para generar electricidad para parte de la población de Realejo Alto.

Hacienda de los Brieres / Hispania Nostra
Hacienda de los Brieres (Garachico)
Fue levantada por los comerciantes flamencos Conrado Brier y su suegro Juan Flaniel durante el siglo XVII a las afueras de la Villa y Puerto de Garachico en un medio rural, donde las otras haciendas estaban en manos de la aristocracia insular. La propiedad es un buen ejemplo de quinta suburbana, con una residencia familiar con numerosas parcelas de regadío que se extendían por las laderas de San Pedro. A lo largo de la historia ha sido sembrada de viñedos, plátanos y otros árboles frutales. Ha sobrevivido a la destrucción del volcán de 1706, permaneciendo en manos de sus descendientes. El edificio mira al mar, al pie del camino Real que comunica Daute y el Valle de Santiago y Guía de Isora.

Casa Amarilla / El Día
Casa Amarilla (Puerto de la Cruz)
Construida en el siglo XVIII, la Casa Amarilla fue el primer centro del mundo en estudiar primates y tuvo un papel decisivo en la psicología de la Gestalt. A pesar de su importancia histórica y científica, actualmente se encuentra en estado de ruina imparable, con trabajos de demolición en su interior y apuntalamientos que apenas la mantienen en pie.

Hacienda la Gorvorana / Hispania Nostra
Hacienda la Gorvorana (Los Realejos)
Esta gran casa canaria del siglo XVII es un ejemplo notable de la arquitectura tradicional. El capitán don Francisco Gorvalán, que acompañó al Adelantado Fernández de Lugo en la conquista de Tenerife, recibió estas tierras en el Repartimiento, las puso en cultivo y de él recibieron el nombre. En 1699 se constituye en mayorazgo por Juan de Grimón, señora de La Gorvorana, de quien lo hereda su hija María López de Vergara y Grimón, quedando bajo la administración de su hermano Baltasar de Vergara y Grimón, I Marqués de Acialcázar, que construye el edificio, para luego pasar por herencia a la marquesa de Breña y posteriormente, en 1765, por matrimonio al marqués de Mejorada del Campo. En 1877 fue vendida a los hermanos Leal, indianos canarios retornados. En la segunda mitad del siglo XX, la hacienda empieza a perder territorio en favor de las nuevas urbanizaciones.
La hacienda era administrada por mayordomos nombrados por sus dueños. En 1757 se trasladó a Tenerife para administrar la Hacienda, Matías de Gálvez, que sería Virrey de Nueva España y padre de Bernardo, también virrey de Nueva España y participante eficaz en la Guerra de Independencia de Estados Unidos en apoyo de los rebeldes americanos. Asimismo fue hermano de José de Gálvez, creador del Archivo General de Indias.
Dotada con abundantes aguas de riego – que le llegaban por atargeas de argamasa-, esta Hacienda fue considerada durante el siglo XVIII como la propiedad más rentable del Realejo de Arriba.

Casa Familiar de Agustín Espinosa / Hispania Nostra
Casa Familiar de Agustín Espinosa (Los Realejos)
Agustín Espinosa García (1897-1939) fue un poeta canario integrante del Grupo Surrealista de Tenerife y figura clave del panorama vanguardista insular, ya que desempeñó un papel central como creador de la moderna prosa en Canarias durante las décadas de 1920 y 1930. Espinosa falleció en esta casa. En ella se formaron los hermanos Espinosa y durante el verano se preparaban recitales, pequeñas obras de teatro y veladas para ser presentadas en el cercano Teatro-Cine Realejos.

Molino de agua de la Plaza de las Angustias / Hispania Nostra
Molino de agua de la Plaza de las Angustias (Icod de los vinos).
Este molino de agua, situado en la plaza de la ermita de Nuestra Señora de las Angustias en Icod de los Vinos, es una construcción hidráulica del siglo XVII. Forma parte de un conjunto de molinos que aprovechaban las aguas del barranco Caforiño para la molienda de grano, siendo uno de los elementos más representativos del patrimonio industrial de la zona.

Hacienda de los Príncipes / Hispania Nostra
Hacienda de los Príncipes (Los Realejos)
La Hacienda de los Príncipes, ubicada en el Realejo Bajo, es una de las edificaciones más emblemáticas del patrimonio civil de Los Realejos. Establecida por Alonso Fernández de Lugo tras la conquista de Tenerife, la hacienda fue el núcleo alrededor del cual se desarrolló el primer asentamiento urbano de la zona. Contó con el primer ingenio azucarero de la isla y diversos elementos arquitectónicos de interés, como molinos, lagares y jardines. En 2009, fue declarada Bien de Interés Cultural con categoría de Monumento.

Castillete de Guayonje / Hispania Nostra
Castillete de Guayonje (Tacoronte)
Situado en los acantilados de Guayonje, es una construcción de estilo historicista que imita una fortificación costera. Fue erigido a principios del siglo XX por Antonio Domínguez de Mesa en una finca de plataneras que servía como villa de recreo para su familia. El inmueble destaca por su torre que domina el paisaje y por elementos arquitectónicos como vanos apuntados que le confieren un aire medieval. El pintor surrealista Óscar Domínguez, hijo del propietario, pasó largas temporadas en esta finca.

Teatro cine Viera y Clavijo / El Día
Teatro-cine Viera y Clavijo (Los Realejos)
Inaugurado en 1947, el Teatro-Cine Viera y Clavijo fue diseñado por el arquitecto José Enrique Marrero Regalado, conocido por obras como la Basílica de la Candelaria y la sede del Cabildo de Tenerife. Este edificio es un destacado ejemplo del estilo neocanario, caracterizado por elementos como arcos, casetones en la techumbre y una fachada con arcadas de medio punto enmarcadas en piedra. El pasado mes de enero, el alcalde de Los Realejos, Adolfo González, anunció que el Ayuntamiento ha iniciado los trámites para tratar de formalizar la adquisición del Cine Viera con sus actuales propietarios, la Fundación CajaCanarias.
La intención del Ayuntamiento es recuperar el inmueble para uso cultural, teniendo en cuenta los condicionantes que presenta su estado actual de conservación, las posibilidades técnicas para su rehabilitación y definición de usos, así como la adaptación del mismo a las normativas vigentes de edificación en recintos de uso artístico y cultural y la normativa propia de elementos patrimoniales en conjuntos históricos, al encontrarse en su caso dentro del conjunto histórico de Realejo Alto.
Este edificio lleva décadas en desuso, lo que ha provocado un serio deterioro, aunque la propiedad ha ejecutado algunas labores de mantenimiento puntuales, actuando para evitar mayores afecciones en la edificación y atendiendo a los requerimientos que se les ha realizado desde el Ayuntamiento de Los Realejos en cuestiones sanitarias y de seguridad, puesto que siempre hemos hecho un seguimiento del estado del mismo.
Suscríbete para seguir leyendo
- Este es el municipio más rico de Tenerife: piscinas naturales, barcos hundidos y una cesión histórica
- Tenerife y los dos mundos separados por los túneles de Güímar
- Nuevos problemas en el Puertito de Adeje: 'El día que pueda te va a dar la patada a ti también
- Así es el municipio más pobre de Tenerife: dos barrios unidos, tradición ecuestre y un almacén de grano
- Un puente hacia ningún lugar sobre la autopista del Sur de Tenerife
- Tenerife pierde la mitad de cazadores durante los últimos cinco años
- El Cabildo de Tenerife deja al Polígono Industrial Valle de Güímar sin el órgano de gestión
- El Cabildo de Tenerife deja Bodegas Insulares por una posible sanción de la UE