Un pueblo de la costa de Tenerife se recupera del susto tras una riada: "Pasamos mucho miedo"

El Ayuntamiento de Tacoronte achaca el río de agua y barro que cayó este jueves sobre El Pris a unas obras en la parte alta del municipio

Estado de El Pris tras el paso de la borrasca Olivier

Arturo Jiménez

Daniel Millet

Daniel Millet

Santa Cruz de Tenerife

Los vecinos de El Pris, un pueblo costero de Tenerife, amanecieron este viernes con el susto todavía en el cuerpo tras la riada que se les vino encima este jueves por la tarde como consecuencia de un gran chaparrón provocado por la borrasca Olivier.

Sandra Izquierdo, alcaldesa de Tacoronte, relata que los vecinos pasaron "mucho miedo" pero que finalmente el río de barro y piedras que vino de la parte alta del municipio no provocó graves daños y "la situación no fue a mayores".

La mañana de este viernes, una veintena de operarios municipales limpiaban las calles de este enclave costero y retiraban las piedras que todavía quedaban regadas por algunas zonas. "La verdad es que fue una situación preocupante pero rápidamente actuamos y ya desde que supimos que estaba cayendo una tromba de agua en las medianías y los altos del municipio pusimos el operativo en marcha al prever lo que finalmente pasó: la riada de agua, barro y piedras que se dirigió a El Pris", detalló la alcaldesa de Tacoronte.

No era la primera vez que pasaba. Otra tromba de agua hace solo un mes provocó una situación similar en El Pris, un enclave famoso por el rico pescado que sirven sus restaurantes. De hecho, el Ayuntamiento sabe cuál es el origen de esta riada.

Según confirma la propia Sandra Izquierdo, todo se debe a unas obras en una canalización que se encuentra al lado de una finca en Guayonje, un enclave situado sobre El Pris. "Por lo que nos han dicho nuestros técnicos, estos trabajos han provocado que cuando llueve intensamente, el agua se acumula, recoge la tierra de esta finca y otras de la zona y baja a toda velocidad a El Pris debido a la gran pendiente", explicó.

El Ayuntamiento ya había detectado que estas obras fueron realizadas por el Cabildo de Tenerife, al que había advertido de que estaban provocando problemas en El Pris cuando llegan intensas precipitaciones. De hecho, responsables de la Corporación insular iban a visitar esta misma semana la zona pero lo tuvieron que aplazar.

Esta visita se pretende realizar la próxima semana para estudiar las soluciones y que no vuelve a repetirse una riada como la de hace un mes y este jueves, que puse en riesgo a todo el pueblo de El Pris. Consistorio tacorontero y Corporación insular ya trabajan para una salida de urgencia.

Operarios trabajan en El Pris recogiendo barro y piedras por la riada de este jueves.

Operarios trabajan en El Pris recogiendo barro y piedras por la riada de este jueves. / Arturo Jiménez

A la mañana de este viernes, el despliegue de operarios, camiones y cubas por parte del Ayuntamiento tacorontero había devuelto cierta normalidad a El Pris, aunque todavía se veían montones de barro acumulados por las calles, sobre todo alrededor de la zona de las piscinas públicas, y algunas piedras procedentes de desprendimientos provocados por la riada marrón que sobrecogió este jueves al vecindario.

También se sacó agua de los bajos de algunas casas y edificios pero la alcaldesa aclaró que los daños no han sido "muy importantes" gracias a que la riada no alcanzó la intensidad que los vecinos temieron cuando comenzó a bajar el agua a toda velocidad.

Las precipitaciones fueron especialmente intensas en la zona noroeste de Tenerife este jueves por la tarde como consecuencia del paso de la borrasca Oliver. También hubo riadas e inundaciones en algunos puntos de Tejina, en el municipio de La Laguna, lo que obligó al Cabildo a ordenar cortes en la carretera TF-13 a la altura de esta localidad.

La normalidad también ha vuelto este viernes a Tejina y otros puntos de la zona metropolitana y el norte de Tenerife afectados por los fuertes chaparrones. El agua corre en abundancia por algunos barrancos y el paso de la borrasca se percibe al simple vista al mirar al mar. En algunas partes el agua azul se ha vuelto marrón por el agua con barro procedente de las zonas altas.

Tracking Pixel Contents