Un técnico inspecciona una de las casas ocupadas en Santa Cruz de Tenerife por si hay riesgo de derrumbe

El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife estudia si las malas condiciones que presenta una de las casas ocupadas en el barrio de El Toscal suponen un riesgo para los jóvenes que la tomaron la semana pasada tras forzar la cerradura de la puerta. Fuentes oficiales municipales confirmaron que un técnico del área de Disciplina Urbanística acudió este jueves a la vivienda y realizó una inspección del inmueble del Pasaje Segundo Ravina para determinar si hay riesgo de derrumbe o si los daños que sufre su estructura suponen algún tipo de peligro para los okupas, que dejaron entrar al técnico municipal.

El pasado martes, un grupo de jóvenes, que ya había tomado una vivienda en la calle El Saludo de El Toscal, ocupó otra muy próxima en el Pasaje Segundo Ravina. La propietaria de este inmueble denunció al día siguiente y acreditó que el inmueble es suyo pero que los agentes le aseguraron que no podían proceder al desalojo porque necesitaban una orden judicial y el juez de solo actuaría si había algo grave.

La dueña de la casa del Pasaje Segundo Ravina, que la recibió en herencia e inició el año pasado el proceso para rehabilitarla con el fin de cederla a sus hijos, ha aclarado que aunque la visitaba a menudo para airearla se encuentra en muy malas condiciones, con daños en el techo y la escalera interior que comunica el primer piso con el segundo. También ha contado que carece de servicio de agua aunque sí tiene luz. Se trata de un inmueble protegido al formar parte del Bien de Interés Cultural (BIC) del Conjunto Histórico Barrio de El Toscal.

La propietaria ha comunicado al Ayuntamiento santacrucero y a la Policía Nacional ese riesgo que podría poner en peligro a los okupas por temor a que pudiera acarrear alguna consecuencia en el caso de que se produzca un accidente. Esta mujer comenta que la situación es «tan esperpéntica», tras haberle comentado la Policía que no puede hacer nada para desalojar la vivienda pese a interponer una denuncia el día siguiente a la ocupación, que una de sus principales preocupaciones es que «me achaquen la responsabilidad de lo que les pueda pasar a esas personas si se viene abajo el techo o sufren alguna desgracia ante las pésimas condiciones que presenta».

Los vecinos se han movilizado, han celebrado ya una reunión, colocaron este jueves un tablón de madera para bloquear la entrada de la casa del Pasaje Segundo Ravina y han llegado a estudiar la opción de organizar patrullas ciudadanas ante la inseguridad que han desatado estas ocupaciones en el barrio, situado en pleno centro de la ciudad. Recuerdan que este grupo que ha tomado las casas de El Saludo y Pasaje Segunda Ravina ha protagonizado varios incidentes en la zona.

La propietaria de la casa del Pasaje Ravina Segundo se reunió este jueves por la mañana con el alcalde de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez. Por la tarde lo hizo una representación de los vecinos del barrio preocupados por la inseguridad. Bermúdez les aseguró que hará todo lo posible por atender sus demandas y les mostró su preocupación por los acontecimientos, pero les recordó que las competencias para proceder al desalojo las tienen los órganos judiciales y la Policía Nacional.

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