"Preocupación y tristeza" entre los alumnos de un instituto de Tenerife por el traslado de un compañero migrante a otra isla

El alumnado de 1º de la ESO A del IES Sabino Bethelot, en el municipio de El Sauzal, lamenta el inesperado traslado de uno de sus compañeros a otra isla. El menor procedía de Mali y llegó a la Isla el año pasado, cuando comenzó el curso escolar de sexto de primaria. En una ocasión les regaló a todos sus compañeros y amigos una pulsera. Hoy, su mesa vacía está cubierta con esas pulseras «las pusieron en su sitio como un recuerdo de que sigue estando presente en el aula», explica su tutor Roberto Ruiz.

«Se trata de personas, no de mercancía». Así expresaron los alumnos su «profunda preocupación y tristeza» por la partida de uno de sus compañeros en una carta que han hecho pública por redes sociales. Los alumnos lamentan que se repita una situación por la que ya otros compañeros –que habían llegado a la Isla tras migrar desde sus países africanos de manera irregular– hayan tenido que dejar el centro y ser trasladados a otras zonas del Archipiélago. 

En el escrito apelan al vínculo que habían creado con su compañero y la adaptación que había logrado el pequeño de 12 años con el resto de alumnos. «Estaba muy bien integrado en el aula y tenía su grupo de amigos», asegura su profesor Roberto Ruiz. De hecho, la idea de escribir una carta fue del propio alumnado. Papel y boli y toda la clase del grupo A de 1º de la ESO se puso de acuerdo para dedicar una sesión a escribir cómo se sentían por la partida de su amigo a otro punto del Archipiélago. 

Las ideas que más se repetían describían la tristeza de no haber podido despedirse. «Si ya es traumático para una persona adulta, imagínate para un adolescente, con esta edad, que no se puede despedir ni de su amigo», subraya el tutor que juntó las ideas principales de cada carta hasta crear un escrito común que describe los sentimientos compartidos por todos sus compañeros.

Hablar de migración en el aula

En las aulas del IES Sabino Bethelot no pasa desapercibida la situación migratoria en Canarias. Roberto Ruiz asegura que se realizaban actividades para que el grupo estuviera más unido e integrado. También se centraban en explicar «por qué estos chicos tienen que migrar, sus necesidades sociales y económicas y cómo lo hacen», puntualiza el docente.

Los últimos datos oficiales sobre la llegada de personas migrantes de manera irregular a las costas de Canarias muestran que en esta primera quincena del mes de octubre han llegado 1.620 migrantes, de los que 284 son menores. Las cifras señalan un progresivo aumento en la llegada de niños y niñas. Tal es así que el porcentaje de menores migrantes ha subido del 2,8% en 2023 al 13,6% en lo que va de año y, en concreto en la primera quincena de octubre, el porcentaje alcanzó el 17,5%. 

Ante la preocupación sobre el incremento en la llegada de menores migrantes, la integración de estos niños y niñas se vuelve crucial. Por ello Ruiz y el resto de alumnos espera tener «buenas noticias y que (el chico) vuelva a formar parte de la clase».

Recogida de firmas

Además del escrito están realizando una recogida de firmas que trasladarán al centro en el que se encontraba el menor con el objetivo de hacer eco de la situación. Una misión que han logrado con sobresaliente, pues el tutor se sorprende al ver la repercusión que ha tenido la publicación de la carta en las redes sociales. Lo que comenzó como una medida de sus alumnos para «desahogarse», ya reúne cientos de «me gustas» y decenas de comentarios de apoyo. 

La carta concluye con la petición de que «nos expliquen las razones de esta decisión tan repentina y que reconsideren la posibilidad de que nuestros compañeros vuelvan al centro». Al mismo tiempo expresan uno de los deseos más compartidos por 1º de la ESO A y es que «al menos, nos permitan despedirnos adecuadamente de él».