La hora de los fans del manga, el cosplay y los videojuegos

Parece que los personajes de anime y series japonesas se han escapado de los libros y pantallas. Ahora recorren los alrededores de Santa Cruz para entrar en el Recinto Ferial, donde se concentra la mayor reunión de tecnología y nuevas tendencias de Canarias, la TLP. En realidad quienes visten atuendos extravagantes son amantes del cosplay, una actividad en la que los aficionados al mundo de la fantasía y la animación japonesa usan accesorios y trajes que representan un personaje específico. Pelucas -muchas pelucas-, batas, ropa de colores llamativos, pedrería... Así vestirá la capital hasta el domingo, aunque también hay quienes son apasionados a los videojuegos y la tecnología. En su caso, visten de la manera más cómoda para pasar una tarde entre talleres de robótica, juegos de rol y videojuegos como el Lol, Tekken 8 o Valorant. El caso es que miles de personas tienen como objetivo rodearse entre una cultura asiática y compartir sus gustos por la tecnología.

Tras el éxito de la apertura de la Zona Lan-Party, el espacio en el que los más gamers pasarán los próximos días en el Recinto jugando con sus propios equipos de PC y consolas, se inauguró la Zona Summer-Con. En la parte delantera del Recinto Ferial se encuentra la parte de la feria tecnológica. En este espacio hay actividades para cualquier público, desde jóvenes hasta adultos, fans de la cultura asiática o no. Además se le ofrece un hueco al talento local, pues aloja a más de 60 artistas de toda Canarias e incluso Península que venden láminas, pegatinas y otros materiales en relación a películas, series, animes o videojuegos. 

También hay varias tiendas que ofrecen productos como figuras y tazas con cientos de personajes dependiendo del gusto de cada uno. «En la Isla es difícil encontrar este tipo de tiendas y aquí las encontramos todas en un mismo sitio», confiesa Daniel Henriquez. El jóven, que lleva varios años asistiendo a la TLP, se declara amante de todo producto que tenga que ver con el mundo del videojuego pero aclara el problema de tener que desplazarse a tiendas «muy específicas» o que se encuentran lejos «para poder adquirir una simple camisa con su personaje de anime favorito». «Aquí encuentras un montón de cosas y conoces a artistas que tienen muy buenos trabajos», detalla.

Una forma de despejar la mente

Johane Fumero y Arturo Pieñero vienen a la TLP, sobre todo, por los videojuegos. Se encuentran sentados frente a la gran pantalla en la que se retrasmiten los torneos de Valorant, League of Legends, Tekken 8 e EA Sports FC 24. Cuando se les pregunta si son buenos jugando responden con un humilde «por supuesto» aunque entre risas Piñero acaba confesando que él «no tanto». De todos modos no es relevante. Según Fumero, «jugar es una manera de despejar la mente», a lo que Pieñero añade: «En vez de estresarte por la vida te estresas por los videojugos». Así, su plan del día es ver jugar a las decenas de personas que están conectadas al PC y esperar su turno para tratar destruir antes la base del equipo contrario con el manejo de ratón y teclado. 

Mayichi, Shadoune666, RatorGamer y Nia Lakshart, primeros invitados en la feria

Los pilares de la Zona Summer-Con comienzan precisamente con los videojuegos. Cuenta con distintas áreas equipadas con PlayStation 5, Nintendo Switch y PC en los que se puede jugar a una gran variedad de videojuegos. Otro de los protagonistas es el K-Pop. El fenómeno es un esilo musical coreano que ha marcado tendencia en los últimos años entre los más jóvenes. En Canarias ha cobrado mucha importancia desde la pandemia, pues solistas y grupos preparan actuaciones de baile inspiradas en las coreografías de cantantes coreanos. 

La canción Sheesh, del grupo coreano Babymonster o Mascara del grupo musical XG fueron algunos de los ritmos que recorrieron los 24.000 metros cuadrados del Recinto Ferial. Pues el sonido retumbaba por todos los puestos. Mientras, el escenario principal de la entrada se ocupó con los alumnos de la escuela de baile coreano T-same. Los jóvenes con talento para el baile coordinaron sus coreografías frente a un público que trataba de imitar sus pasos sin poder evitar seguir el ritmo pop. Para esta modalidad de baile, la TLP acogerá un concurso en modalidad individual el viernes a las 17:30 y otro en grupal y el sábado a las 20:30.

El tercer pilar clave de este encuentro es el cosplay, el arte de caracterizarse como un personaje de la cultura audiovisual, ya sea películas, series, anime o videojuegos se encuentra en cada esquina del Recinto Ferial. Las personas que hacen cosplay confeccionan sus trajes y luego traen a la vida a los personajes mediante actuaciones. 

Adhara González es una de las cosplayers que tiene un personaje elegido para cada día de TLP. Hoy iba de Fern una joven maga humana que acompaña a Frieren, una elfa, como su aprendiz y miembro del grupo en el manga y anime, Sousou no Frieren.Su atuendo consistió en una peluca lila, con un broche confeccionado por ella misma con una especie de arcilla, una gabardina negra y camisa blanca. Como elemento principal llevaba una varita hecha con materiales caseros como un palo de fregona, platina, y la famosa mezcla de cola, papel y agua conocida como art attack. «Llevo haciendo cosplay desde hace un año con mis amigos y te lo pasas muy bien», subraya.

Entre los más de 1.500 puestos que se suceden enrte las dos plantas del Recinto muchos se dedican a los juegos de mesa. En total acuden 11 editoriales de reputación nacional como son Devir, TCG Factory o Tranjis Games. En estos espacios es posible jugar los tradicionales juegos de mesa pero también transformarse y convertirse en un detective de la armada francesa cuya familia se desplazó a Estados Unidos durante la guerra o en un periodista que ha publicado sus informaciones por toda Europa. En estos juegos de rol, la persona abandona su vida cotidiana y pasa a protagonizar escenarios aleatorios en los que el jugador cambia de personalidad, juega un teatro improvisado y tiene que descifrar misterios junto al resto de amigos.

El Recinto Ferial se llena con más de 1.500 puestos entre talleres, tiendas y zonas de videojuegos

Otro de los espacios del Recinto es la Zona Indie. Un gran espacio dedicado a seis desarrolladoras de videojuegos indie de gran reputación. Algunos de los juegos que se exponen en exclusiva son el aclamado Luto, cuya versión de prueba ha sido jugada en directo por streamers como Rubius e IlloJuan; o Arico: Tales From the Abyss, el Metroidvania en 3D canario. Asimismo hay un hueco en el que se muestran juegos de distintos estudios. Una oportunidad para que las personas asistentes presenten sus proyectos publishers (personas de empresas editoras de videojuegos que se encargan de sacarlos al mercado).

Un espacio para la formación

Para los más creativos están disponibles los puestos de formación. Se llevan a cabo varios talleres formativos relacionados con el mundo de la robótica y la programación. Gabriel Pérez, uno de los encargados del área de robótica explica que su puesto es «muy sencillo tanto para niños como para los más adultos». En él se puede crear desde una tortuga, a base de legos, que se mueve sola hasta una guagua que reacciona y se detiene según el color del semáforo. También hay un espacio para las manualidades: figuras con papel y orejas como accesorios para el pelo. En este espacio se dispone de todos los materiales y guía necesarios para llevarse a casa las manualidades que los asistentes sean capaces de elaborar. 

Brenda Rodríguez y Laura Moñino son dos amigas de Tenerife. Ambas trabajan en Holanda pero han decidido pasar sus vacaciones en la TLP. En concreto duermen en la Zona Lan-Party pero por la mañana se encontraban visitando todos los puestos de la feria tecnológica. Ellas se durmieron a las 2:30 de la mañana. «Pero muchas personas se quedan jugando toda la noche y descansan por la mañana», explica Rodríguez. Aún así el ambiente que respiraron por la mañana era de mucha ilusión. «Para nosotras es un evento muy divertido y en el que compartimos con gente que tiene nuestros mismos grupos», detalla Moñino al mismo tiempo que observa una de las actuaciones de k-pop. El caso es que para muchos teleperos el primer día del encuentro no fue sino una pequeña muestra de la variedad de juegos y de entretenimiento del que disfrutarán en los siguientes cuatro días restantes.