Iberdrola construirá dos parques eólicos en Granadilla y Arico por 54 millones

En conjunto, producirán 27,7 megavatios y podrían abastecer a casi 23.000 familias

En la construcción de Tarajales y Finca San Juan emplearán a 70 trabajadores en total

Parque eólico en Arico.

Parque eólico en Arico. / Andrés Gutiérrez

E. P.

Iberdrola recibe las autorizaciones para construir dos parques eólicos en Granadilla de Abona y Arico, con una inversión de 54 millones de euros. Se suman a la planta fotovoltaica Llanos Pelaos III, en Fuerteventura, su primera planta fotovoltaica de Canarias que cuenta con 7 MW y permitirá abastecer de energía limpia a más de 4.000 hogares.

El parque eólico Tarajales, en Granadilla de Abona, recibió su autorización administrativa y tendrá una potencia de 10,4 megavatios (MW). Con su producción, logrará energía suficiente para suministrar a más de 7.000 hogares y evitar la emisión de 13.000 toneladas de CO2 al año. Durante su construcción se emplearán 35 personas y el proyecto supondrá una inversión de 21 millones de euros. Para su ejecución se ha contratado a proveedores nacionales y el 50% de los socios son siendo locales, según la compañía.

Este parque eólico pondrá en marcha varias iniciativas medioambientales, tales como la erradicación, seguimiento y control de especies exóticas invasoras o la retirada de muros de piedra seca (basalto) afectados y correcto acopio para ser reutilizada en la restauración ambiental e integración paisajística de las obras. Además se llevará a cabo la delimitación de zonas de hábitat de interés comunitario para su protección durante la obra.

El parque eólico Finca San Juan, ubicado en Arico, que ya dispone de acuerdo de ejecución del Gobierno de Canarias, tendrá una potencia de 17,3 MW y producirá energía equivalente al consumo de 15.960 hogares, evitando 28.000 toneladas de emisiones C02. Durante su construcción, espera emplear de forma directa a 35 personas y estima una inversión de 33 millones de euros.

Las actuaciones medioambientales y patrimoniales serán una variable más a lo largo de la ejecución, como, por ejemplo, el balizamiento y vallado de los elementos patrimoniales del entorno y erradicación y seguimiento y control de especies exóticas invasoras. Los acabados de los edificios e instalaciones auxiliares serán revestidos con materiales y tonalidades adecuadas al entorno donde se localizan y también se hará una prospección arqueológica, acompañada de la recogida del material arqueológico en superficie.

Iberdrola opera en Canarias desde 2019 el parque eólico de Chimiche (Granadilla), desarrollado conjuntamente con una agrupación de pequeños empresarios locales. Con una potencia de 18,3 megavatios (MW) y una inversión de más de 25 millones de euros, el proyecto generó durante su construcción más de 200 empleos. El parque abastece de energía limpia a una población equivalente de 15.000 hogares, evitando la emisión de 33.000 toneladas de CO2 al año. Adicionalmente, desarrollará otros 8,8 MW de las plantas fotovoltaicas Llanos Pelaos I, II, y Blanca Solar.