Tenerife necesita de forma urgente 200 millones de euros para reformar las infraestructuras de suministro eléctrico y evitar un nuevo apagón en toda la Isla. Lo exigió este jueves Rosa Dávila, presidenta del Cabildo, ante el «grave riesgo» que corre la Isla de quedarse sin luz como consecuencia de unas instalaciones que «se han quedado completamente obsoletas», algunas «con más de 40 años de antigüedad».

Las declaraciones de Dávila llegan después de que se conociera un informe de Red Eléctrica de España, la empresa que se encarga de garantizar la seguridad y continuidad del suministro, que alerta desde septiembre de 2021 de problemas de seguridad en el sistema eléctrico de Tenerife por la falta de generación de potencia. Según este documento, existe riesgo de sufrir un cero energético como el de La Gomera del pasado mes de julio.

Ante la situación «crítica» de las infraestructuras isleñas, la presidenta de Tenerife pide al Gobierno estatal que declare «de inmediato» la «emergencia energética» para que los 200 millones de euros que necesita la red isleña para garantizar su seguridad se puedan ejecutar «lo antes posible», la única manera legal de que los operadores puedan realizar las actuaciones sin que se extiendan en el tiempo con las licitaciones y demás requisitos burocráticos.

«Una ley nacional de 2013 impide a los operadores renovar sus equipos, por lo que muchos se han quedado obsoletos y algunos tienen más de 40 años de antigüedad», asegura Rosa Dávila (CC), que añade: «Esto ha colocado al sistema tinerfeño en una situación crítica, con un peligro muy alto de sufrir nuevos apagones. Por eso exigimos medidas excepcionales, como la declaración de emergencia energética, que permitirá suprimir los múltiples condicionantes burocráticos para empezar ya los trabajos de renovación de las infraestructuras eléctricas».

Los procedimientos para renovar la potencia son competencia del Ministerio para la Transición Ecológica pero el Estado ha ignorado hasta en cuatro ocasiones, desde 2021, las advertencias del Gobierno canario sobre la fragilidad del sistema eléctrico de Tenerife. Según el informe de Red Eléctrica, la Isla tiene un déficit de 80 megavatios y las opciones de que se repitan los ceros energéticos de 2009, 2010, 2019 y 2020 son muy altas.

La mandataria del Cabildo de Tenerife recuerda que la Federación Canaria de Islas (Fecai), con representación de los siete cabildos, aprobó en su última reunión del pasado día 6 que se exceptúe a Canarias de los procedimientos administrativos que permitan la renovación urgente de los sistemas de generación de las centrales térmicas.

Al respecto, Casimiro Curbelo, presidente de la Corporación de La Gomera y de turno de la Fecai, aseguró tras el encuentro que dada la situación de «emergencia» que existe en cuanto a los sistemas insulares de generación, «hay que lograr una respuesta inmediata del Estado que permita resolver este problema, que es muy grave para cada una de las islas».

Rosa Dávila subrayó que el panorama de Tenerife es «especialmente delicado» pues en contra de lo que ocurrió con el apagón de La Gomera del pasado mes de julio, «en Tenerife no se podría resolver un cero energético con grupos electrógenos». «Es imposible en una isla con cerca de un millón de habitantes», dejó claro.

Esta solicitud de emergencia energética será el único punto que volverán a abordar los cabildos canarios en el encuentro que mantendrán el próximo día 26. Los informes advierten que Tenerife necesita tres centrales eléctricas, mientras la mayoría de la Isla solo se abastece principalmente de una, la que gestiona Endesa en el Polígono Industrial de Granadilla de Abona. «Hay que modernizar unos sistemas que se han quedado anticuados para aumentar la potencia eléctrica, garantizar la seguridad del suministro y hacer que toda la red sea más eficaz y sostenible», remarca la presidenta tinerfeña.

Otras islas se enfrentan al mismo peligro de apagón inminente. Es el caso de Gran Canaria, que tiene un déficit de potencia todavía mayor que el de Tenerife: 120 megavatios. El presidente del Cabildo grancanario, Antonio Morales, también lanzó un mensaje de alerta ante la «gran fragilidad» del sistema eléctrico del Archipiélago por la falta de inversiones para sustituir los grupos eléctricos que se han quedado obsoletos.

«Fruto de la inacción»

Ante esta inseguridad, Morales reclama medidas «urgentes y regladas» al Ministerio para la Transición Ecológica y al Gobierno de Canarias para garantizar el suministro a la población. «Estamos ante un riesgo que es fruto de la inacción, el desconocimiento y el olvido de Canarias. No podemos seguir dependiendo de un Ministerio, da lo mismo la época y el color político, que desconoce nuestra realidad y nuestras singularidades», subrayó.

Los tinerfeños saben muy bien lo que significa quedarse sin luz. Han sufrido seis grandes apagones en este siglo, dos producidos por desastres naturales (la riada sobre Santa Cruz de 2002 y la tormenta Delta de 2005) y otros cuatro que afectaron a toda la Isla por fallos en la red (2009, 2010, 2019 y 2020).