El Juzgado abre diligencias previas por la ocupación de Cuna del Alma

El juez unifica todas las denuncias de la empresa y toma declaraciones, este mes, a 25 ocupantes, a querellantes y a denunciantes

Infografía de Cuna del Alma.

Infografía de Cuna del Alma. / EL DÍA

El Juzgado de Instrucción número 3 de Arona abrió diligencias previas por la invasión del suelo en el que se desarrolla el proyecto turístico Cuna del Alma, en El Puertito de Adeje. El juez Javier García Rámila comenzó a tomar declaración a 25 denunciados, supuestos ocupantes, así como a la Junta de Compensación, al director del proyecto y a los tres denunciantes. Las comparecencias continuarán hasta el próximo día 29.

El procedimiento 2212/2022 es fruto de la decisión judicial de unificar las múltiples denuncias interpuestas por la empresa Segunda Casa Adeje, SL desde que el 22 de julio del año pasado un grupo de activistas acampó por primera vez en la zona donde se desarrollaban los trabajos. En tales denuncias se alegan cuestiones como allanamiento, agresiones, ocupación, desobediencia, daños a maquinaria y daños a las obras, presuntamente.

El momento de mayor tensión se registró el 26 de septiembre pasado, cuando un grupo de activistas se personó en las oficinas de la empresa, a la que accedieron dos de los protestantes y donde se produjo un altercado con el director del proyecto. Esta situación también generó dos querellas contra el directivo por parte de los ocupantes, quienes previamente habían denunciado un supuesto intento de desalojo violento por parte de la empresa.

La propiedad del proyecto alega en sus denuncias cuestiones como allanamiento, agresiones, ocupación, desobediencia, daños a maquinaria y daños a las obras, presuntamente

El 2 de diciembre pasado, la Dirección General de Patrimonio Cultural del Gobierno de Canarias suspendió totalmente las obras del proyecto Cuna del Alma, cuya primera piedra fue colocada el 5 de mayo. El día 30 del mismo mes se produce una paralización parcial de los trabajos ordenada por el Cabildo de Tenerife tras la denuncia del colectivo Tegüico argumentando la destrucción de restos arqueológicos. La Alta Inspección de la Dirección General de Patrimonio Cultural propuso una sanción de 600.000 euros a la empresa, mientras que la Consejería de Transición Ecológica paralizaba la obra de forma cautelar por la presencia de la planta viborina triste. El pasado noviembre, la Agencia Canaria de Protección del Medio Natural anunció otra sanción de 110.000 euros porque el proyecto carecía de informe de impacto ambiental. La paralización total de las obras tuvo lugar hace más de siete meses en base a que afecta a grabados y restos arqueológicos.

La empresa ha defendido en todo momento que cuenta con las autorizaciones preceptivas para desarrollar este proyecto.

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