Guía de Isora

La balsa de Las Charquetas completará el anillo insular de agua regenerada

El Cabildo cuenta con 18 millones de euros para construir la y para realizar la red de distribución | Esta obra suministrará a Adeje, Guía de Isora y Santiago del Teide

Obra de una depuradora en la comarca Sur. | | E.D.

Obra de una depuradora en la comarca Sur. | | E.D. / J. A. M.

La construcción de la balsa de Las Charquetas y de la red de distribución completará el anillo insular de agua regenerada. Para ello, el Cabildo de Tenerife y la Sociedad Estatal de Infraestructuras Agrarias (Seiasa) acuerdan una inversión superior a los 18 millones de euros. Estas actuaciones serán financiadas en un 80% (14.416.000 euros) por el ente dependiente del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), con cargo a los fondos recibidos a través del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia de la Unión Europea, y en un 20% (3.604.000 euros) por la Corporación que preside Pedro Martín.

El presidente insular explica que «este convenio de colaboración, que formalizaremos el próximo mes, permitirá prácticamente finalizar el anillo insular del agua regenerada, garantizando el necesario equilibrio en su distribución y trasladando agua de calidad a los agricultores y agricultoras de toda la Isla». En este caso, abarca a los municipios de Adeje, Guía de Isora y Santiago del Teide.

Pedro Martín defiende que «la balsa de Las Charquetas se hace imprescindible para regular los caudales y la asignación de los distintos consumos en la comarca agrícola del oeste de Tenerife», mientras que la red de distribución «garantizará el riego agrícola de las explotaciones entre la costa de Adeje, Guía de Isora y Santiago del Teide, con agua de calidad y a un precio asequible para los agricultores y agricultoras».

Las obras

El objetivo de las fases I y II es establecer una red de distribución de agua depurada a presión que domine una superficie útil de cultivo de unas 1.200 hectáreas, en su mayoría dedicadas al cultivo de platanera (casi el 90%), dentro de los municipios de Adeje, Guía de Isora y Santiago del Teide.

El Cabildo destaca que en esta actuación está prevista una inversión de 8.480.000 euros y el trazado de las redes se ha diseñado teniendo en cuenta que en la mayor parte del recorrido las tuberías discurrirán por pistas y caminos existentes.

El Cabildo financia el 20% de la obra y la sociedad estatal Seiasa aporta el 80% de la actuación

En cuanto a la balsa reguladora de Las Charquetas, su realización cuenta con un presupuesto estimado de 9.540.000 euros, contemplando una capacidad aproximada de 250.000 metros cúbicos, con una altura total de 16 metros y que estará cubierta con una lámina multicapa.

El consejero insular de Agricultura, Ganadería y Pesca, Javier Parrilla, explica que la ejecución de este proyecto se dividirá en tres fases y tendrá un plazo de ejecución de 36 meses. «Las dos primeras son las relativas a la conducción del agua regenerada hasta Santiago del Teide, uno de los municipios más importantes de la Isla en el ámbito agrícola, y la tercera, que se realizará de forma paralela, es la construcción de la balsa de Las Chaquetas».

El consejero incide en que esta actuación se enmarca «dentro de la estrategia para extender el uso de agua regenerada en la agricultura, que da mayor garantía de estabilidad en el suministro y de calidad del agua».

Cabe recordar que la sociedad mercantil estatal Aguas de las Cuencas de España (Acuaes), del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, acomete en la zona obras del Sistema de depuración y reutilización de aguas residuales del Oeste de Tenerife, cuya inversión total prevista supera los 27 millones de euros. Lo hace en el marco del convenio firmado con el Cabildo que supondrá una inversión de 170 millones de euros. Con ello, se dotará a Granadilla de Abona, Santiago del Teide, Guía de Isora, Arona Este-San Miguel, la comarca de Acentejo y el Valle de La Orotava de un sistema de saneamiento y depuración integral que permitirá resolver de manera definitiva el problema de incumplimiento de las directivas europeas sobre protección de agua.

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