La promotora de Cuna del Alma recurre para retomar los trabajos de construcción de esta urbanización de lujo en el Puertito de Armeñime, en la costa de Adeje. La empresa Segunda Casa Adeje SL anunció ayer la presentación de un recurso de alzada contra la resolución de la Consejería de Transición Ecológica y Lucha contra el Cambio Climático del Gobierno de Canarias que denegó la autorización para trasladar los ejemplares de una planta, la viborina triste, a otro emplazamiento y garantizar así su preservación.

La Consejería responsable de la planificación territorial, dirigida por el socialista José Antonio Valbuena, ordenó el pasado día 11 paralizar de forma cautelar la totalidad de las obras de Cuna del Alma por «amenaza inminente» de daño ambiental sobre flora silvestre protegida. El Ejecutivo regional adoptó esta determinación al asegurar que había constatado la presencia de viborina triste (Echium triste) en los terrenos afectados por el proyecto y denegó a la promotora la petición de trasladar los ejemplares de esta planta herbácea a otro lugar.

Segunda Casa Adeje SL alega en su recurso que el Cabildo de Tenerife es «el órgano competente» para resolver sobre la translocación de la viborina desde el año 2002 y «no el Gobierno de Canarias». Asimismo, la compañía señala que, «según la ley, desde el año 2010 el órgano ambiental municipal es el competente para resolver sobre la translocación o cambio de localización».

«La ley autoriza la translocación de este tipo de especie cuando se trate de una obra pública de interés general», señala la promotora en un comunicado de prensa, que prosigue: «En este caso, en este proyecto las vías de la urbanización que se están construyendo son de titularidad municipal e incluyen viario comarcal y canalizaciones comarcales para estación depuradora de aguas residuales, agua desalada o aguas residuales ya tratadas y aptas para riego. Por lo tanto, la promotora defiende que este proyecto sí debe considerarse como una obra de interés público».

La empresa recuerda que la Consejería «ha concedido autorizaciones para translocar viborina para obra pública en otras localidades, como por ejemplo en Arona en 2021, en idénticas circunstancias». La promotora califica la denegación del traslado de los ejemplares de esta especie «como injustificada, desproporcionada y arbitraria». Concluye que en caso de que esta solicitud sea rechazada, «se procederá a acudir a los Tribunales de Justicia».

Duras críticas

La paralización de los trabajos de esta urbanización de villas de lujo y plazas hoteleras en una extensión de más de 430.000 metros cuadrados de la costa adejera ha provocado duras críticas de los sectores económicos tinerfeños al producirse después de que la promotora obtuviera todos los permisos de las administraciones competentes –el propio Ejecutivo regional, el Cabildo de Tenerife y el Ayuntamiento de Adeje– y colocara la primera piedra en un acto oficial el 5 de mayo.

El 31 de mayo, la Dirección Insular de Patrimonio Histórico del Cabildo de Tenerife suspendía cautelarmente las obras en un área que supone el 2% de todo el terreno del proyecto por la destrucción de un yacimiento arqueológico, motivo por el que el Gobierno canario abrió un expediente de sanción. El día 11 de noviembre llegaba la orden de Transición Ecológica del Ejecutivo regional de paralizar todos los trabajos al detectarse ejemplares de viborina triste. Y el pasado 23, la Agencia Canaria de Protección del Medio Natural, también del Gobierno canario, incoaba un expediente sancionador a la promotora por carecer el proyecto de la evaluación de impacto ambiental preceptiva.

Un informe botánico encargado por el Cabildo de Tenerife limita la presencia de la planta viborina triste a 8.605 metros cuadrados, el 2% de los 437.000 que abarca el proyecto turístico Cuna del Alma. La promotora solicitará que se le autorice a reanudar las obras en el 96% del suelo sin afección alguna.