La Consejería de Educación, Universidades, Cultura y Deportes del Gobierno de Canarias decreta la incorporación de un ayudante de cocina y un auxiliar de comedor al Centro de Educación Obligatoria (CEO) San Miguel Arcángel, desde hoy. La medida evita la suspensión del servicio a los 335 alumnos que corrían el riesgo de quedarse sin él a partir del lunes próximo. Con ello, además, los usuarios recuperan el menú de dos platos.
Vaneda Morales, presidenta de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA), mostraba ayer la satisfacción de la comunidad escolar del centro situado en el casco urbano de San Miguel de Abona. La medida satisface la demanda que plantearon ante Educación durante dos semanas por la falta de personal: una auxiliar que le corresponde al centro por el aumento de un módulo de comedor como consecuencia del cambio de categoría del colegio, así como una cuidadora y el cocinero, ambos de baja laboral temporal.
La resolución de la Consejería de Educación emitida ayer equivale a una orden de traslado de una ayudante de cocina y una auxiliar de comedor, que llegan hoy al CEO San Miguel Arcángel procedente de otro centro escolar. «En principio, parece que se resuelve el tema» aplicando una medida que «hasta ahora no habían aplicado», y que también plantearon los padres con carácter previo. «Creemos que este personal se mantendrá aquí hasta que se incorporen el cocinero y la auxiliar», señala la presidenta de la AMPA. «A partir de mañana (por hoy), vuelve la normalidad al comedor y volveremos a ofrecer dos platos al alumnado», anunciaba Vaneda Morales.
El comedor de este colegio tiene problemas desde el inicio del curso, hace mes y medio. La reconversión del Centro de Educación Infantil y Primaria (CEIP) San Miguel Arcángel en Centro de Educación Obligatoria (CEO) conlleva un incremento de alumnado y de usuarios del comedor, por lo que Educación concedió el aumento de un módulo del servicio y de la plantilla con una auxiliar. Hasta ahora no cuenta con ello. Eso y la falta del cocinero y de una cuidadora llevó a anunciar la suspensión del comedor a partir del lunes, ante la imposibilidad de garantizar la seguridad del alumnado en la sala y en el patio. «Todo parece resuelto», según Morales.
