Es un documento del Gobierno de Canarias al que se han presentado alegaciones y que está abierto al debate. Es la posición del Cabildo sobre el borrador del nuevo Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) del Parque Nacional del Teide. Así lo explica el presidente insular, Pedro Martín. Espera que la Consejería regional sea sensible a esas propuestas y se dé «una vuelta» al documento, porque, «en algunos aspectos, puede ser mejorable». Propone «el mayor consenso posible» en la redacción final.
Considera Pedro Martín que «debemos buscar un adecuado equilibrio, complicado, pero posible, entre utilizar un parque nacional como uno de nuestros principales atractivos y su preservación». Entiende que «puede haber pruebas deportivas y filmaciones de películas, porque es un reclamo magnífico».
Además, valora, «no podemos olvidar a quienes tradicionalmente han ocupado ese espacio, como los apicultores». Sobre todo, «buscar el encaje. No masificar y controlar cualquier actividad, pero no prohibir», señala.
El presidente ve factible que las producciones cinematográficas paguen para que con ese dinero «se mejore la seguridad, la limpieza y el mantenimiento de los senderos o para hacer repoblaciones». Insiste en que «el objetivo no es tanto prohibir como ordenar los controles».
Entiende que «tenemos que conseguir financiación para ampliar la seguridad y hacer más campañas de prevención de incendios». Resume: «Necesitamos un punto en común entre actividad económica y cuidado de la naturaleza». Martín concluye: «Por el Parque Nacional del Teide no se va a prohibir el tránsito de vehículos, no puede ser un modelo similar a Timanfaya, en Lanzarote, pero sí parece necesario ordenar las visitas».
