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Pascua Militar en Tenerife

El volcán de La Palma y el virus, ejes del mensaje en la Pascua Militar

El general Alejandro Escámez se estrena como Jefe del Mando Militar de Canarias con un acto sencillo y sobrio, pero emocionante marcado por las restricciones sanitarias

El piquete de honores desfila ante el Jefe del Mando de Canarias. Carsten W. Lauritsen

Volcán y virus han sido las palabras más repetidas durante el primer discurso con motivo de la celebración de la Pascua Militar como Jefe del Mando de Canarias del recientemente nombrado Alejandro Escámez Fernández. Un acto sencillo y sobrio pero emocionante marcado por las restricciones sanitarias a consecuencia de una pandemia de la Covid-19 que no termina de pasar. La Palma y el mencionado volcán, “las brumas que han ensombrecido el horizonte el año pasado”, han tenido un espacio destacado en el mensaje del General de División, que ha representado al Rey Felipe VI.

El patio central del Palacio de Capitanía General de Canarias, en Santa Cruz de Tenerife, ha acogido el solemne acto castrense con el que se inicia el año militar. En él se hace un balance de lo acontecido y se esbozan los retos a afrontar en el porvenir más inmediato. El general Escámez, además de referirse a la lucha contra el virus y a los efectos del volcán de Cumbre Vieja, ha recordado de manera especial a los militares españoles en el extranjero. En este sentido, ha hecho referencia a la participación de las Unidades de los tres Mandos ubicados en las Islas en algunas de las Misiones Internacionales con las que está comprometida España con relevancia especial la de la Brigada Canarias en el Líbano. Considera el Jefe del Mando en la comunidad autónoma que el Ejército debe continuar en 2022 con su proceso de cambios estructurales y en el camino emprendido hacia la digitalización, Ha recalcado que “las Fuerzas Armadas son una parte más de la sociedad”.

La conmemoración se remonta al siglo XVIII, en concreto a la reconquista de Menorca a los ingleses el 6 de enero de 1782. La ceremonia de este año, en una nueva Epifanía, se inició con la rendición de honores al Jefe del Mando Militar de Canarias por soldados del Regimiento de Infantería Tenerife nº 49 de la Brigada Canarias XVI. A continuación, el representante del Rey procedió a imponer las condecoración de la Cruz del Mérito Militar a ocho oficiales y efectivos de tropa. Un acto austero, sin banda de música -no se escuchó esta vez ni siquiera el himno nacional- , salvo el inconfundible sonido de la trompeta. Después de saludar a las autoridades civiles y militares presentes, entre ellas el alcalde de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez, y el obispo de la Diócesis de Tenerife, Bernardo Álvarez, el general Escámez expresa su orgullo por representar a Su Majestad el Rey en este solemne acto.

Balance de 2021

En su balance de 2021 dedica el inicio del discurso a la emergencia del Volcán de La Palma y a la actuación de as Fuerzas Armadas, con especial mención a la Unidad Militar de Emergencia (UME) con base en Canarias que “en el marco de la pasada Operación Balmis y ahora en la denominada Operación Baluarte han realizado y realizan disitntas labores para paliar los efectos de esta catástrofe en la población civil”. Relaciona las tareas de vigilancia epidemiológica en conjunción con el sistema sanitario, los denominados rastreadores; la colaboración en la Operación denominada Cumbre Vieja con diferentes actividades por tierra, mar y aire, y apoyos requeridos en otras situaciones delicadas. Asimismo, enumera “las numerosas acciones solidarias, de carácter individual, efectuadas por nuestros profesionales, con el Banco de Alimento, con Cáritas, con otras organizaciones no gubernamentales o con los vecinos más desfavorecidos. Menciona Escámez que “todo lo realizado, ha sido hombro con hombro con nuestra Guardia Civil con el resto de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y con los servicios esenciales de nuestras islas”.

El general Alejandro Escámez en Pascua Militar en Canarias. Carsten W. Lauritsen

No todo fueron emergencias

Tras aludir alas emergencias, su balance inicial resaltan la otra tarea clave de las Fuerzas Armadas: la seguridad. “Garantizada en la de los espacios aéreos, marítimos y terrestres insulares y nacionales”, valora. Para ello, las FA “han continuado adiestrándose para poder a enfrentar, llegado el caso, cualquiera de las emergencias, riesgos o amenazas que se describen en nuestra recientemente renovada Estrategia de Seguridad Nacional”. En su desglose del año pasado el General Escámez resume e insiste en que “no ha sido un monográfico de situaciones adversas, puesto que hemos seguido cumpliendo con nuestro cometido esencial que no es otro más que el de producir ese bien intangible e invisible que es la Seguridad”. Desglosa los ejercicios aéreos, navales, terrestres o de simulación de emergencias realizados en el entorno de las Islas como el Ocean Sky o la hasta ahora inédita proyección a la península de la Brigada Canarias para participar en el mayor ejercicio del Ejército de Tierra. Una referencia a la Guardia Civil, “nuestro Benemérito Instituto, de sólida y arraigada naturaleza militar, ha seguido protegiendo el libre ejercicio de los derechos y libertades y garantizando la seguridad ciudadana de todos los que vivimos en estas Islas Afortunadas” Su logro de “la confianza, el reconocimiento y afecto de todos los canarios” es compartido para el Jefe del Mando de Canarias con e conseguido también “por nuestra Policía Nacional, Autonómica y Local, actores esenciales e imprescindibles tanto en lo cotidiano como en lo excepcional”.

Diez grandes retos

A continuación, el general Escámez ha esbozado alguno de los retos de las Fuerzas Armadas para el 2022 “en los que la guarnición militar del Archipiélago también será artífice, partícipe o beneficiaria”. Hace una referencia literaria: “Como bien decía Don Quijote, amigo Sancho todas estas borrascas que nos suceden son señales de que presto ha de serenar el tiempo”. Y relaciona el decálogo de los objetivos militares de cara al año recién estrenado, Entre ellos sobresale seguir en el proceso de Transformación Digital o mantener las operaciones y despliegues Internacionales comprometidos, “y si así se decide finalmente liderar con un General español la Misión de NNUU en Líbano y el aumento de capacidades en Irak”. Otros retos son “continuar con el rigor y exigencia en la instrucción y el adiestramiento; mantener la seguridad en los espacios marítimos, aéreos y terrestres canarios y proseguir con la implementación de la nueva estructura orientada al proyecto Ejército 2035”.

El año se plantea asimismo como clave para “mejorar las infraestructuras y la calidad de vida en las Bases y Acuartelamientos; seguir adecuando los modelos de trayectoria profesional de las distintas escalas e incorporar nuevos materiales y equipos para renovar y modernizar los que actualmente disponemos”. En este ámbito destaca “los programas conducentes a la adquisición de los Helicópteros H135, nuevos aviones de combate Eurofighters, los blindados 8x8 Dragón, o el buque para rescate de submarinos, así como la entrada en servicio del nuevo buque de transporte logístico Isabel este mismo año”. No olvida mencionar “el estar en disposición de contribuir a la seguridad” del desarrollo de la Cumbre de la OTAN que tendrá lugar en junio de este año en España. En el ámbito institucional “consolidar por parte del Ejército de Tierra el proyecto Marca Ejército y la figura de sus embajadores de marca”. Para finalizar, “contribuir a la difusión de las efemérides e hitos históricos como la conmemoración de los 100 años de la entrada en servicio de las primeras Unidades acorazadas”.

El factor humano

En el último bloque de su discurso, el general Escámez, subraya: “Ninguno de los logros ni ninguno de los retos se podrán llevar a cabo, sin tener como centro de gravedad a los hombres y mujeres que forman parte de las Fuerzas Armadas y de la Guardia Civil, y particularmente la de los Mandos de Canarias”. Resalta “su compromiso, su convencimiento, la interiorización y puesta en práctica de los valores que presiden nuestra Institución”. De ahí que solicite “a todos los componentes de la guarnición canaria con independencia del color del uniforme, que sigan siendo ejemplares en sus quehaceres profesionales y personales y dignos representantes de la sociedad a la que pertenecemos y servimos”. Ha felicitado a los condecorados, ha citado a la familia como pilar esencial del militar, ha recordado a los que ya no están y se ha encomendado a la Virgen de la Candelaria para que ayude a paliar las consecuencias de las dificultades y facilite el logro de todos los nuevos retos planteados. El general ha significado la reducción o aplazamiento de muchas de las actividades de carácter social, institucional y cultural, que habitualmente comparten los militares con los conciudadanos, por la necesaria prevención sanitaria. Entre ellas conciertos, exposiciones, seminarios o Jornadas de Puertas abiertas “que nos permitan compartir con los convecinos nuestras capacidades, nuestro patrimonio histórico y sobre todo nuestro estilo, forma de ser y espíritu de servicio”. Advierte de que la pandemia también impide celebrar el tradicional brindis con cava o vino español que solía cerrar actos de esta naturaleza. Espera Escámez que en la medida de lo posible se puedan recuperar este año recién iniciado. Concluye con otra tradición: los “vivas” al Rey y a España.

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