La consejera del área de Medio Natural y Seguridad del Cabildo de Tenerife, Isabel García, ha solicitado a los gobiernos de España y de Canarias que actúen sobre los episodios de E. coli y vertidos de hidrocarburos aparecidos en diferentes puntos de la costa de la isla en las últimas semanas.
Una situación que ha llevado al cierre de espacios costeros y que es “preocupante”, por lo que considera “imprescindible” prevenir la contaminación, ha dicho García este miércoles en un comunicado.
García se ha comunicado con ambas administraciones y ha enviado un oficio dirigido a la Dirección General de Lucha contra el Cambio Climático y Medio Ambiente y a la Dirección General de Seguridad y Emergencias, ambas del ejecutivo canario.
También a la Dirección General de la Marina Mercante, dependiente del Ministerio de Transportes, y la Sociedad de Salvamento y Seguridad Marítima (SASEMAR), en el que solicita que se concreten qué medidas se pueden adoptar para resolver estos sucesos.
La consejera, que también ha contactado con representantes del Congreso con el fin de que el asunto llegue a la Cámara Baja, ha recordado que durante este verano diversos tramos de costa, playa y charcos de Tenerife se han tenido que cerrar al público.
Solicita al Gobierno de Canarias un informe exhaustivo sobre las fuentes que desde tierra pueden haber ocasionado los episodios de E. coli y otros contaminantes, así como la identificación de las entidades o personas responsables, medidas correctoras previstas y exigencia de responsabilidades por los daños que haya ocasionado la contaminación marina por vertidos, legales o ilegales.
Al Estado le ha pedido asimismo un informe sobre los riesgos y episodios detectados de contaminación marina y las hipótesis sobre el origen.
También pregunta sobre cómo se ha exigido responsabilidad o qué controles se establecen para evitar los contaminantes en el mar, así como las previsiones de colocación de sistemas de control de vertidos desde barcos que atraviesan las islas y fórmulas para hacer prevalecer el principio de quien contamina, paga.
