Un informe de la Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife, fechado el 3 de marzo de 2020, ya señalaba que el Puerto de Los Cristianos resulta «insuficiente» para responder a la demanda de operaciones que soporta, tanto en el tráfico de pasajeros como en el de mercancías, desde y hacia las Islas de La Gomera, La Palma y El Hierro. Este documento, firmado por el presidente del ente estatal, Carlos González, vincula de manera directa el alivio del muelle aronero con el desarrollo del de Fonsalía, en Guía de Isora. La habitual imagen de vehículos que, tras el desembarque, colapsan la salida, a través de la frágil trama urbana de la localidad sureña, camino de la TF-1 es solo «la punta del iceberg» de un problema mucho mayor. Este, además, ha crecido de manera exponencial en paralelo al aumento del número de buques desde 1996, fecha a la que se remonta el trabajo, hasta la actualidad. Basta un dato: se ha pasado de los 173.885 vehículos registrados por el pasaje entonces a los 442.923 de la fecha del documento, justo antes de comenzar la pandemia de la Covid-19.
El informe se elabora a petición de Puertos del Estado, en relación con la posible alternativa que supone la construcción de un puerto en Fonsalía, en el municipio de Guía de Isora, para el tráfico de pasajeros y mercancías en las islas de la provincia occidental. El texto recuerda la calificación de Los Cristianos como Puerto de Interés General y refleja que el de Guía de Isora recibió esa condición y, posteriormente, le fue retirada por ley.
Los Cristianos constituye, siempre según refleja este documento a lo largo de sus 15 páginas, «un nodo fundamental de la red de transporte interinsular» y «uno de los puertos con mayor número de pasajeros en el sistema nacional». Un dato comparativo: en 1996, el total fue de 1.391.561 por los 1.970.455 contabilizados en 2019; es decir, 578.894 más. De ellos, más del 85% corresponden al tráfico de las línea regulares interinsulares de conexión con los puertos de Santa Cruz de La Palma, San Sebastián de La Gomera y La Estaca (El Hierro). La previsión es alcanzar la cifra de más de 1,8 millones de pasajeros en 2023.
Respecto a las mercancías la diferencia entre ambas fechas es de 353.837 toneladas de aumento (de 252.472, en 1996, a 606.309 en 2019). Los datos del número de buques mercantes que atracaron en el puerto también resulta elocuente. De 2.097 se ha pasado a 2.839 (739 más). Con cualquier tipo de navegación (cabotaje o exterior), nacionalidad (español o extranjero) o tipo de barco (ferries, carga general, etc.).
Otro aspecto a destacar a la hora de valorar la importancia del puerto de Los Cristianos es el de los datos que evalúan las Autoridades Portuarias a partir de los buques mercantes entrados en los puertos y el GT de cada buque. El GT es una medida de capacidad que cuantifica el volumen de todos los espacios interiores, incluso camarotes, alojamientos y demás. Viene del inglés Gross Tonnage, traducible por arqueo bruto. Diez millones GT más de una fecha a otra.
La ‘oferta’
Frente a la demanda, el informe desglosa cuál es la oferta que ofrece el puerto. A nivel de infraestructura está formado por tres alineaciones principales, dos longitudinales continuas en el dique de abrigo y una transversal. Las longitudinales son utilizadas por las compañías Fred Olsen (desde 1973) y Naviera Armas (2000) dedicadas al tráfico regular de pasaje con las Islas Verdes, léase La Gomera, La Palma y El Hierro.
En cuanto a la capacidad de las explanadas para las operaciones de atraque y desembarque de las compañías de tráfico interinsular, el puerto dispone de unos 2.320 metros lineales de preembarque. Supone una capacidad para 464 vehículos o su equivalente en unidades de transporte de mercancías. Además hay que añadir varias instalaciones como la dársena de embarcaciones menores o pesca tradicional, un espacio para la acuicultura, el Muelle Viejo donde se sitúan embarcaciones dedicadas a excursiones marítimas o la Marina Seca con 105 atraques. Por último, la Estación Marítima, muy cerca de los atraques de los ferries, donde se ubican oficinas y dependencias oficiales o de las navieras.
Los déficits
«Estrictas», en el sentido de pequeñas o estrechas, y «claramente insuficientes». Así evalúa el informe de la Autoridad Portuaria las instalaciones del Puerto de Los Cristianos. Una conclusión: a pesar del significativo incremento durante 24 años en todos los valores y especialmente destacado en cuanto a los vehículos en régimen de pasaje «todos los tráficos se continúan gestionando en un puerto muy similar en dimensiones a las existentes en 1996 o incluso en fechas anteriores».
El informe desgrana asimismo el número de buques dedicados a tráfico interinsular –cuatro o cinco– sus horarios –según la temporada de verano y la invernal– o la función social de estos trayectos. Desde la necesidad de acudir a recibir tratamientos médicos a los hospitales de referencia hasta el traslado de efectivos para luchar contra los incendios.
El informe valora, además, que las limitaciones del Puerto de Los Cristianos, «ya de manifiesto, sin duda se van a incrementar en el corto y medio plazo para condicionar el crecimiento de los tráficos marítimos y la prestación de servicios a las rutas regulares de las Islas Occidentales con criterios de eficacia, economía y calidad». Esas limitaciones son básicamente cuatro: insuficiencia en cuanto a las dimensiones y el número de atraques disponibles; falta de superficie terrestre para las operaciones de embarque; tráficos de desembarque y una Estación Marítima «infradimensionada para las necesidades actuales».
Operaciones
Las esloras de varios de los buques son mayores que las longitudes de los muelles donde operan en Los Cristianos. En el caso de Fred Olsen, el Benchijigua Express, y en el de Naviera Armas, el Volcán de Taburiente. Estas circunstancias obligan a efectuar las maniobras con extrema precaución, especialmente en el caso de coincidencia de dos buques –más de dos es imposible–, una circunstancia habitual dada la alta frecuencia de escalas y cuando las condiciones meteorológicas son desfavorables. La previsión es que el problema vaya a más por las dimensiones de los nuevos buques.
Lo de la falta de superficie terrestre en el embarque es pura matemática. Si el puerto dispone de 2.320 metros lineales y la capacidad de carga de los barcos que prestan servicios es de 5.200, faltarían 3.000.
El acceso terrestre al y del puerto de Los Cristianos es una de las claves del debate estos días. Se realiza a través del viario del núcleo turístico sin que la conexión con la TF-1, la Autopista del Sur, se haya adaptado a las necesidades del tráfico portuario
La limitación de la capacidad de los accesos origina frecuentes colapsos operativos tanto para los usuarios del puerto como para los vecinos. Un ejemplo; el desembarco simultáneo de dos buques con alta ocupación supone inyectar en el tráfico de la trama urbana más de 500 vehículos o la parte equivalente en unidades de transporte, en muchos casos camiones de grandes dimensiones o articulados como plataformas cargadas. Resultado: la alta densidad del tráfico en Los Cristianos, junto al de la Autopista genera un tapón a los que tratan de salir en la llegada de los ferries. Esto retrasa a su vez el embarque y la salida del buque.
Otro ejemplo del informe. En el trayecto marítimo San Sebastián de La Gomera-Los Cristianos, de 35 kilómetros, se invierten 35 minutos. En coche, desde la salida del ferry hasta llegar a la conexión con la TF-1, tres kilómetros, se puede tardar en ocasiones algo más de una hora duplicando el tiempo de navegación.
Por último, el estado de la Estación Marítima «infradimensionada para las necesidades actuales». Construida en 1990, cuando el tráfico del puerto de Los Cristianos era de 470.000 pasajeros, sigue manteniendo las dimesiones y la configuración originales. Conclusión: «No permite la prestación adecuada y de calidad al volumen actual de pasajeros, que cuadriplica la cantidad inicial».
El informe resume las causas que dificultan el desarrollo del puerto de Los Cristianos «para adaptarse a la demanda creciente». En primer lugar, «la localización en medio de un núcleo turístico y de importantes playas». Por otro lado, las condiciones ambientales, ya que las aguas del puerto de Los Cristianos «se encuentran dentro de la Zona de Especial Conservación Franja Marina de Teno-Rasca y afectadas por medidas de conservación». A eso hay que añadir el acceso terrestre a través del viario del núcleo turístico con la saturación y los colapsos ya mencionados. El informe valora «las soluciones son complejas porque la conexión se realiza a través de una trama urbana no proyectada en su día para acoger el tráfico que actualmente genera la infraestructura portuaria». Propone una serie de actuaciones integrales «de elevado coste y gran dificultad de realización».
Fonsalía: ¿una solución?
El informe entra en el puerto de la costa de Guía de Isora con una frase: «Hace más de dos décadas se desechó la ampliación del puerto de Los Cristianos y se planificó la ejecución del puerto de Fonsalía». Este fue clasificado de interés general del Estado por la Ley 62/1997, de 26 de diciembre. A partir de ahí la Autoridad Portuaria comienza con los estudios para construir un puerto que permitiera el desarrollo del tráfico con La Palma, La Gomera y El Hierro, además de contemplar una dársena deportiva de 619 atraques. Se redacta el proyecto e incluso se inicia la tramitación. No obstante fue desclasificado como infraestructura de interés general por la Ley 2/2004 de 27 de diciembre, de presupuestos generales del Estado para el año 2005.
El documento explica lo que dice el Plan Insular de Ordenación de Tenerife (PIOT) que «define el futuro puerto de Fonsalía» y respecto a Los Cristianos asegura que «si bien está previsto el traslado al futuro puerto de Fonsalía, en el periodo de tiempo en el que siga prestando servicios de transporte marítimo interinsular es una incógnita». A día de hoy lo cierto es que lo sigue siendo.
El informe apuesta porque «con la absorción por el puerto de Fonsalía del tráfico comercial interinsular de las provincia occidental, el puerto de Los Cristianos se debería redefinir y adecuar a los usos restantes: pesquero, deportivo y de excursiones».
De todas maneras, como conclusión, el escrito apunta: «Resulta evidente que esta Autoridad Portuaria no puede decidir o anticipar de forma autónoma el futuro escenario puerto de Los Cristianos-puerto de Fonsalía». Pero remata: «Mientras Los Cristianos mantenga la calificación de puerto de interés general del estado, la Autoridad Portuaria de S/C de Tenerife seguirá atendiendo la demanda de tráfico comercial que dicha instalación admita».
