Valentín González, consejero del Partido Popular (PP) en el Cabildo de Tenerife, acusa al gobierno insular de poner de manifiesto su «incompetencia» e «incapacidad» para «poner sobre la mesa una alternativa viable a la depuración de aguas en la Isla Baja». Algo que se registra transcurridos dos años del mandato, establece el consejero de San Miguel.
Recuerda que desde el PP se propuso la aplicación «inmediata» del acuerdo plenario adoptada el pasado mes de enero al respecto y que, además, se optara, de forma urgente, por la solución de la depuración extensiva o natural» en la comarca de la Isla Baja». González Évora explica que se trata de una solución «avalada por todos los ayuntamientos de que la forman y por la Plataforma Ciudadana Los Silos-Isla Baja, que se han decantado, mayoritariamente, por esta fórmula de depuración».
El consejero Popular incide en que «el Cabildo no puede ignorar la voluntad de la ciudadanía y de las instituciones municipales», haciendo hincapié en que todos «han manifestado su apuesta por una gestión del agua más acorde al desarrollo integral y sostenible de la comarca: un modelo de gestión circular que abarque el ciclo hidrológico, donde se tengan en cuenta aspectos ambientales, económicos y sociales».
A juicio de González Évora, la propuesta que el PSOE planteó en la última sesión plenaria requiere una valoración negativa, porque implica que «un carrusel de camiones llenos de aguas residuales circularán por todo el norte para trasladar las aguas negras de la Isla Baja hasta la depuradora de Valle de Guerra, en La Laguna, y lo hará a través de una de las vías más colapsadas de todo Tenerife», en alusión a la autopista del Norte (TF-5). «Esta no es una solución sostenible ni desde el punto de vista económico ni desde la perspectiva ambiental», valora el consejero.
Los soclistias propusieron, y fue aprobado, destinar 1,2 millones de euros a transportar las aguas residuales de Garachico hasta Valle de Guerra.
El Partido Popular ha pedido explicaciones sobre la propuesta socialista al Pleno, «pero el consejero del área, Javier Rodríguez, no fue capaz de ofrecer una respuesta sobre el coste definitivo de esta actuación y sobre la duración de la misma». Pero lo que preocupa más al consejero del PP es que «ni siquiera aportaron un informe técnico que avale que esla alternativa más adecuada».
Ante esta situación, González Évora anuncia que el PP plantea «que se agilicen, con la máxima urgencia, los trabajos para la elaboración del estudio de viabilidad y la ejecución de un sistema de depuración extensiva o natural en Garachico y Los Silos, al que, además de El Polvillo, se incorporen los núcleos de Tierra del Trigo y Erjos».
Para los Populares, la solución que plantea el Cabildo ante la problemática de los vertidos en esta zona de Tenerife «es tercermundista», y se preguntan «si este (el carrusel de camiones) es el modelo que el Cabildo va a implantar en el caso de que hubiera problemas de vertidos en otros lugares de la Isla». Reclaman «una solución definitiva al tratamiento de las aguas residuales en todo el norte de Tenerife y, más en concreto, en la Isla Baja, una comarca que ha sido históricamente castigada con la pasividad del Cabildo de Tenerife».
Valentín González Évora pone de manifiesto que la Corporación insular debe liderar la búsqueda de una solución definitiva al problema de la depuración de aguas en la Isla Baja, «en lugar de tensionar o enfrentar a las corporaciones locales de la comarca». La situación actual es producto, «una vez más, de la falta de liderazgo que caracteriza a este gobierno, que no dispone de una hoja de ruta ni de un proyecto político solvente que responda a las necesidades de los tinerfeños».
