Ante la declaración de la emergencia de las obras para proteger el entorno de la Basílica y la calle de La Arena, Sí se Puede plantea la ejecución de la escollera semisumergida prevista en 2012 por el Cabildo y el encargo de un estudio de viabilidad para producir energía renovable de origen mareomotriz. La iniciativa se basa en el anuncio del Ayuntamiento de que a finales de mayo contrató una empresa para ejecutar las obras de forma inminente.

De acuerdo al planteamiento del propio gobierno municipal en esa publicación sobre la importancia de la colaboración a la hora de encontrar soluciones, la portavoz, Lourdes Mondéjar, recuerda que en abril de 2012 se hizo público que el Cabildo contemplaba la escollera semisumergida en el paseo de San Blas, con el objetivo de proteger de la fuerza del mar a la Basílica, el convento y el propio paseo. El proyecto debía estar disponible antes del verano pasado así como la negociación de la financiación con Costas.

Mondéjar condiera que «es la fórmula más costosa y la más efectiva y duradera, dado que la situación se agravará progresivamente como efecto adverso del cambio climático». De ahí que plantea al gobierno local que «considere el análisis detenido del proyecto encargado por el Cabildo», lo mejore si es necesario y busque la financiación externa precisa.

La organización ecosocialista destaca que, además de sus efectos devastadores, «la fuerza del oleaje puede aprovecharse con tecnologías novedosas, de bajo impacto y muy eficientes, que pueden generar enormes beneficios ambientales y económicos a través de la producción eléctrica renovable, con impacto positivo en Candelaria y, quizá, en otras zonas de la Isla». Por ello, insta al Ayuntamiento a encargar un estudio de viabilidad para la producción de energía renovable mareomotriz entre San Blas y el muelle.