El Ayuntamiento de San Juan de la Rambla acaba de mejorar las medidas de seguridad contra ahogamientos en las tres principales zonas de baño de la localidad, donde ha instalado tres postes de acero con conexión directa al teléfono de atención de emergencias 112 y dispositivos salvavidas OneUP, que pueden lanzarse a larga distancia y se inflan al entrar en contacto con el agua.
El alcalde ramblero, Ezequiel Domínguez (PSOE), destaca la puesta en marcha de esta mejora de la seguridad de las zonas costeras antes del comienzo de la temporada estival y el consiguiente aumento de usuarios. «Los tótems de seguridad ya están disponibles en la playa de Las Aguas; el Charco del Río, en La Rambla, y en el Charco de La Laja, en el casco. Están ubicados en zonas visibles y con instrucciones claras en varios idiomas para ser usados en caso de emergencia por cualquier persona que lo requiera».
Estos dispositivos, que han costado casi 27.000 euros, son estructuras fijas de acero inoxidable de 1,8 metros de altura y unos 30 centímetros de diámetro; de color rojo, y completamente autónomos ya que disponen de placa solar y batería, «esto permite que se trate de un punto de seguridad activo durante 24 horas». En su interior cuentan con dispositivos salvavidas tras una puerta de cristal de metacrilato. El funcionamiento es sencillo: el sistema de alerta se activa en cuanto se rompe la puerta de metacrilato, lo que provoca una llamada instantánea al servicio de emergencias además de una sirena acústica y otra visual lumínica.
Los salvavidas con tecnología OneUp son flotadores plegados en un pequeño tubo de 17,5 centímetros y 370 gramos de peso, elaborado con materiales anti-fricción. Se denominan inteligentes debido a que «se inflan automáticamente al contacto con el agua gracias a la pastilla de sal que contiene en su interior, que al disolverse, libera un pequeño resorte que abre una cápsula de aire comprimido que hincha el flotador». Es reutilizable, cuenta con una vida útil de cinco años y soporta hasta 145 kilos.
"El dispositivo puede ser utilizado por cualquier persona y se convierte en una herramienta de gran ayuda en caso de ahogamiento, especialmente si se produce en zonas no vigiladas o fuera del horario o épocas de no funcionamiento del servicio de salvamento y socorrismo. Cada tótem está dotado con tres unidades de salvavidas inteligentes y además la conexión directa al 112 es una garantía de seguridad en caso de emergencia”, concluye el alcalde.
"El dispositivo puede ser utilizado por cualquier persona y se convierte en una herramienta de gran ayuda en caso de ahogamiento"
Jonay Méndez (AIS-CC), tercer teniente de alcalde encargado del área de Hacienda subraya la inversión de 26.773 euros en pro de la mejora de la seguridad de las zonas de baño. “La cantidad invertida, que para otros ayuntamientos puede ser simbólica pero que dada las dimensiones del nuestro es significativa, representa nuestro compromiso por modernizar el Consistorio ramblero y sus recursos, ofreciendo tanto al vecino como al visitante, todas las garantías de seguridad y comodidad”.
