El Pleno de Arona aprobó anoche las enmiendas presentadas por la oposición a las modificaciones de crédito propuestas por el gobierno municipal (PSOE) con los 15 votos a favor que suman PP, CC, Ciudadanos por Arona, Sí Podemos Arona y cuatro concejales socialistas (se ausentaron José Luis Gómez y Pura Martín), frente a ocho abstenciones de Cs y el alcalde, José Julián Mena, y sus seis ediles afines. Este acuerdo conlleva una posible responsabilidad contractual o patrimonial para este Ayuntamiento, ya que la mayoría de las partidas eliminadas se corresponden con gastos de obras ya adjudicadas y en marcha, según un informe de Intervención.

La mayoría de los concejales del Pleno defendieron su enmienda, que “pone a las personas en el centro de todas las políticas municipales, apostando por un incremento de las partidas destinadas a Servicios Sociales y a todos aquellos aspectos que tengan que ver con el tejido productivo aronero”. En un comunicado, PP, CC, CxA, Cs, Sí Podemos y PSOE (se incluye su logotipo) aseguran estar de acuerdo en reivindicar la importancia de impulsar obra pública en el municipio, aunque “creemos firmemente que en este momento concreto lo primero son las personas y tenemos que garantizar que ni un solo aronero deje de tener cubiertas sus necesidades básicas en momentos tan críticos”. Por eso, dicen que incrementar el 1,5 millones propuesto por Mena para Servicios Sociales y la ayuda “para salvar a las pymes y autónomos, así como al sector del taxi, debe situarse por encima de otras cuestiones”, señalan.

El gobierno criticó el acuerdo porque paraliza obras por 4,5 millones y “expone al municipio a indemnizaciones millonarias a las empresas adjudicatarias”. En un comunicado, señala los trabajos a detener: el acondicionamiento del césped artificial del estadio Antonio Domínguez (Playa de las Américas), mejoras en el polideportivo del casco urbano para la práctica de hockey, la cubierta del pabellón y el Centro Cívico de Las Galletas, la reforma del campo Dionisio González (El Fraile), el parque urbano de Las Rosas, el Centro Cultural de Buzanada y la urbanización de la zona deportiva de Valle San Lorenzo. “Todos ellos trabajos que esos partidos han venido reclamando desde hace meses e, incluso, años”, apostilla el gobierno.

Los concejales socialistas Dácil León, Yurena García, Elena Cabello y Juan Sebastián Roque son acusados de romper la disciplina de voto del Grupo Socialista y a los también ediles del PSOE (con responsabilidad de gobierno y salario) José Luis Gómez y Pura Martín les atribuyen “facilitar la mayoría para paralizar los trabajos” al ausentarse del pleno.

El portavoz municipal, Leopoldo Díaz Oda, reprochó a los opositores que, “a pesar de tener un mes para hacer propuestas, no han hecho ni una”, conminándoles a explicar a los vecinos la paralización de las obras. “Lo único que les preocupa, que les obsesiona, es que las impulse Mena. Eso les da miedo”, dijo.