La gran alfombra de la plaza del Ayuntamiento de La Orotava, que se elabora allí con motivo de las fiestas del Corpus Christi desde 1919, volverá a hacer historia en 2021. Las restricciones que impone la pandemia del coronavirus obligan a introducir algunas novedades que pasarán a los anales de esta celebración. Regresa a este espacio tras el parón obligado de 2020 y, por primera vez, los alfombristas de la calle, que seguirán sin poder exponer su arte en la Infraoctava del Corpus el próximo 10 de junio, tendrán un espacio en la plaza para complementar el tapiz de tierras del Teide con dos corridos de flores. Y también por primera vez, ante la imposibilidad de que el Santísimo suba en procesión hasta la plaza, un pedazo del tapiz bajará hasta la Parroquia de Nuestra Señora de la Concepción para que se pueda celebrar, sin salir del templo, una pequeña procesión claustral.

Una parte de la gran alfombra del Corpus se trasladará de la plaza a la iglesia

El Ayuntamiento villero acogió ayer la presentación del diseño de la alfombra de 2021, que condensa en el espacio central los tres tapices que normalmente ocupan toda la plaza. La obra, que estará flanqueada por dos corridos florales que se elaborarán en los últimos días, pretende ser “una alfombra para el Santísimo, pero también un homenaje al grandísimo esfuerzo de todo el personal sanitario y voluntario durante esta crisis, y un recuerdo a las víctimas de la pandemia”, según palabras del director de la Escuela Municipal de Arte Perdigón y de la Alfombra en Honor al Corpus Christi, Domingo González Expósito.

Una parte de la gran alfombra del Corpus se trasladará de la plaza a la iglesia

Tapices superpuestos

Según Expósito, otra de las novedades será “la adaptación del espacio central para realizar los tres tapices dentro”, superpuestos, “pero la alfombra no sólo se realizará en el centro, sino que realmente cubrirá casi todo el espacio habitual de la plaza de una forma diferente. Habrá un espacio central formado por una burbuja de dos arcos que abarca unos 525 metros cuadrados de superficie. Luego hay un segundo espacio, el negro, también de tierras, que ocupa una superficie de unos 166 metros cuadrados. Y un tercer espacio, de 84 metros cuadrados, para realizar con flores. En total, ocupará 775 metros cuadrados de los 945 que tiene la plaza”.

Esta superficie, en la que habrá un espacio importante ocupado por flores, requerirá el uso de entre 500 y 600 kilos de arenas del Teide, cuando lo habitual es que se usen en torno a 900 kilos. Parte de ese material está almacenado de años anteriores y permitirá crear una paleta de 17 colores. El motivo central está dedicado a San José, Jesús y la Virgen María, y detrás aparecen las imágenes de una nieta con su abuela, ambas con mascarillas, y un enfermo intubado, auxiliado por la mano de un sanitario. Sobre un fondo negro, que evoca tiempos oscuros, la luz se abre paso y las cañas, situadas a un simbólico metro y medio de distancia, rendirán homenaje a las víctimas del Covid-19. También hay guiños al logo de la iglesia misionera, a la tercera alfombra del Corpus, elaborada hace un siglo, y a la donación de sangre.

El trabajo de los alfombristas se realizará en el interior de una gran carpa que se instaló ayer, por lo que sólo será posible seguir la evolución de la alfombra a través de unas cámaras que emitirán en directo a través de la web municipal (www.laorotava.es). El Consistorio trabaja con la idea de retirar la carpa unos días antes de la Infraoctava para organizar un sistema de visitas seguro, similar al que se aplicó con el belén gigante de la plaza el pasado diciembre.

El edil de Fiestas, Alexis Pacheco (CC), aseguró que los alfombristas dedicarán 40 días de trabajo a dar forma a este tapiz, “cumpliendo estrictos protocolos sanitarios”. Su labor no será visible desde la calle para evitar que se produzcan aglomeraciones. Si Sanidad lo permite, la intención del Gobierno villero es dar la posibilidad de ver la alfombra a partir del lunes de la llamada semana grande, que comienza el 7 de junio.

“Como nos dicen que subir al Santísimo en procesión será imposible en un 99% de posibilidades, hemos ideado un proyecto seguro para que un trozo de la alfombra pueda bajar hasta la parroquia”, explicó Pacheco. Para lograrlo se construirá un soporte circular de madera, reforzado con una estructura metálica y con una superficie adherente. Medirá unos dos metros de diámetro. Sobre él se confeccionará, con arenas del Teide, un motivo inspirado en el símbolo del pez que representaban los primeros cristianos. Este traslado será “un momento crítico y crucial, pero saldrá perfectamente”, auguró el alcalde villero, Francisco Linares. En todo caso, se realizará con tiempo suficiente para poder realizar retoques en la obra, si fuera necesario.

Una vez que ese pedazo de la alfombra de la plaza se sitúe en el interior del templo, los alfombristas de flores recrearán, a una escala menor, la cruz que enmarca este motivo en el tapiz de la plaza.

El párroco de La Concepción, Óscar Guerra, resaltó el profundo sentido religioso y social de esta obra de arte efímero que en su motivo principal recuerda “el 150 aniversario de la proclamación de San José como custodio y protector de la iglesia”, en un año que el papa Francisco ha dedicado a “la belleza y la alegría del amor familiar”. Francisco Linares mostró su confianza en que “tras un año en el que se harán muchas cosas que no habíamos hecho nunca”, en 2022 las fiestas “volverán a la normalidad en la plaza y en las calles”.