El Ayuntamiento de Puerto de la Cruz restó este miércoles importancia a los desprendimientos que se produjeron este martes 20 de abril de 2020 en "un sector no habitado del litoral de Punta Brava". El Gobierno portuense (PSOE-ACP) emitió un comunicado para "transmitir tranquilidad a los vecinos y las vecinas del barrio", que en 2015, 2016 y 2018 vivieron momentos de angustia por derrumbes, desalojos y grietas en la calle Tegueste y en la calle Pelinor. "Como ha podido constatar el personal técnico municipal, que acudió a la zona junto a la Policía Local y al concejal de Ciudad Sostenible y Planificación, David Hernández (ACP), no existe ningún peligro para las viviendas ni para la carretera, ya que se encuentran fuera de la zona de alcance", remarca el Consistorio de la ciudad turística.
El suceso se ha producido en el sector donde se ubicaba la antigua perrera, que se encuentra vallado desde hace años porque era conocida su inestabilidad y entraba dentro de lo previsto que pudiera producirse algún desprendimiento. Los técnicos municipales han comprobado que las piedras que se han desprendido se encontraban en la superficie del acantilado y que, por tanto, el hecho no ha afectado a ninguna cueva ni a la estabilidad estructural de la zona.
En cualquier caso, el Ayuntamiento portuense anuncia que se ha puesto en contacto con especialistas en estabilización de taludes familiarizados con el lugar, con el fin de que confirmen lo determinado por los técnicos municipales, y se realizará el correspondiente seguimiento a la evolución de la zona.
El exedil de Urbanismo Juan Carlos Marrero (CC) compartió a través de la red social Facebook varias imágenes y un vídeo del desprendimiento y reclamó a los actuales responsables que "despierten" y actúen en la zona.
La calle Tegueste se derrumbó parcialmente en mayo de 2015 y en septiembre de 2018, mientras se ejecutaban las obras de estabilización, la aparición de grietas hizo saltar de nuevo las alarmas y obligó a desalojar a 19 vecinos. Tras meses de trabajos, la vía se dio por estabilizada en mayo de 2019.
Seis viviendas de la calle Pelinor, en Punta Brava, que fueron desalojadas el 18 de noviembre de 2016 por grave riesgo de derrumbe. A punto de cumplirse cinco años de la evacuación de los 11 vecinos que residían entre los números 29 y 38, el Consistorio portuense aún busca la fórmula legal más adecuada para intervenir en una zona de la costa que no volverá a tener un uso residencial.
Sólo en la calle Tegueste se invirtieron 1,6 millones de euros y aún queda pendiente el embellecimiento exterior, presupuestado en casi medio millón de euros. El Consistorio portuense ha invertido unos 830.000 euros en las complicadas labores de estabilización de la calle Tegueste, situada en un acantilado junto al mar y sobre varias cuevas creadas por la erosión marina, ya tapiadas. Además, se invirtieron unos 600.000 euros en reconstruir el tramo que se derrumbó hace seis años y más de 200.000 euros para estudios, proyectos y el pago de alquileres a los vecinos desalojados.
