El sector de las agencias de viajes tinerfeñas ha perdido por el camino de algo más de un año de pandemia el 30% de sus empresas. Las que resisten, “agonizamos”. Lo afirma como balance David Déniz, presidente desde octubre del año pasado de la Asociación Canaria de Agencias de Viajes y Turoperadores (ACAVyT). Valora como “imprescindible” recuperar la conectividad de la Isla pero establece “para poder salir de esta” una ecuación en forma de cadena. La desglosa así: “La reactivación la genera la demanda; la demanda sólo la impulsa la inmunidad de las vacunas y es la inmunidad de las vacunas la que provocará el aumento de la conectividad de nuestra Comunidad Autónoma hacia el mundo y viceversa”.

Déniz considera que “este es el sector que más ha sufrido en la batalla de la pandemia como consecuencia de la ultraperiferia y la absoluta dependencia de los destinos foráneos, la mayor en el estado”. Para continuar “le echamos 24 horas de tarea todos, trabajadores y propietarios, pero sólo podemos sobrevivir con el tráfico interinsulares y la movilidad está reducida en Canarias con varias islas en nivel 3”. Además, añade, “buena parte del territorio nacional está también cerrado”. Y sentencia: “No puede haber reactivación sin movilidad porque sin demanda las compañías no vuelan y nosotros no vendemos billetes”.

Las agencias de viajes vinculan la nueva conexión al mundo con la inmunidad

Improvisación

Déniz critica “la improvisación en las medidas restrictivas como la tomada los días previos a la Semana Santa respecto a la obligación de hacerse un test de antígenos que nos llevó a cancelar multitud de reservas por esa exigencia”. Lo explica: “ A las familias no le era rentable desplazarse con ese gasto previo fijo. Únicamente nuestra presión posterior hizo que desde el ámbito privado se establecieran convenios con laboratorios para realizar las pruebas a un precio asequible. Pero ya era tarde”.

Las agencias proponen medidas: “Queremos un desplazamiento seguro pero que se pueda viajar por ocio entre islas con la prueba hecha. Se llevó el jueves pasado al Consejo de Gobierno de Canarias pero se quedó en lo de vamos a estudiarlo. Hemos tenido que cancelar todo lo previsto para el puente del 1 al 3 de mayo, sobre todo con gente de la capital, donde es festivo el Día de la Cruz”.

Defiende Déniz que “las ayudas directas no llegan y el comercio minorista se muere, no sólo nuestro sector”. Aunque deja claro que “muchos llevamos dos temporadas completas sin vender nada”.

Se indigna y muestra “impotencia” cuando valora que “las medidas afectan sobre todo a las grandes capitales pero en muchas zona de la Isla, sobre todo en las turísticas del Sur, fundamentalmente extranjeros, aunque también muchos de aquí, no cumplen lo que se impone desde Sanidad”. Recuerda que “vivimos de la venta anticipada. Ya en enero se planifica el verano”.

Valora David Déniz que “la gente está harta con tanto cambio e incertidumbre. Hay quienes me dicen que ya no quieren ni ver las noticias”. Sentencia: “Todo esto unido hace a día de hoy lo tengamos muy crudo”.

Factor clave

La conectividad es para Déniz “un factor clave en los dos sentidos, el de emisor y el de receptor”. Reflexiona: “Si no vienen extranjeros, la Isla no subsiste pero el de aquí también tiene derecho a salir. Y el canario es novelero y gasta cuando está fuera. Resulta ilógico y un sinsentido que un isleño en nivel 3 pueda volar a a la Península, Europa u otros destinos pero no a La Gomera”. Propone que se viaje por ocio de forma responsable y segura siempre con test de antígenos y más en “la única comunidad que los permite”.

El representante de este sector clave en el turismo pone “el ejemplo de Madeira que también forma parte de la UE”. Sin embargo, “desde el minuto 0 ha hecho el cribad oficial en puertos y aeropuertos. Con éxito porque no es un destino de invierno por el clima duro pero este año ha recibido incluso turistas en esa época del año y muchos venían a Canarias”.

Cuenta quien habla siempre desde su experiencia que “un residente canario que viaja por trabajo a la Península vuelve y le piden en el aeropuerto un test que no tiene. Lo mandan tres días a su casa y luego a hacerse la prueba al Servicio Canario de las Salud (SCS) o bien a pasar una cuarentena de una semana. Al otro día está en su trabajo o en la playa porque nadie lo controla”.

Déniz advierte de otros ejemplo: “El Norte de Europa se vacuna de forma masiva y ese flujo lo esperan como agua de mayo competidores directos nuestros como Turquía o Marruecos”.

Insiste en una idea: “Sin pasajeros no vuelan los aviones. Eso es de perogrullo, una cuestión de la demanda, pero también de la oferta. Cuando lo hagan y ahí está el ejemplo de Gran Bretaña y su previsión del 17 de mayo hay que estar preparados. Si no es así, mal asunto”. Porque. En un giro que lo devuelve al principio, concluye: “Sin demanda no hay reactivación y con restricciones en la movilidad no puede haber demanda”.