El gobierno municipal de Arico emitió un bando en el que prohibe acampar en la costa, aplicando así la legislación vigente y las medidas establecidas para controlar la propagación del Covid-19, por lo que los espacios en los que está autorizada la acampada permanecen cerrados. Además, el alcalde, Sebastián Martín, presidió la reunión que convocó con representantes de los cuerpos y fuerzas de seguridad con el fin de solicitar que refuercen sus dispositivos “para evitar un alud de visitantes esta Semana Santa”.
Sebastián Martín y el concejal de Seguridad y Medio Ambiente, Andrés Martínez, mantuvieron la reunión de coordinación en la que transmitieron “la necesidad de redoblar esfuerzos para evitar que se produzcan aglomeraciones de visitantes, tanto en el litoral como en medianías” desde ayer pero, especialmente, a partir del jueves.
Arico es el segundo municipio en extensión de Tenerife, con más de 20 kilómetros de un litoral “plagado de calas y playas” y decenas de kilómetros de senderos y zonas recreativas en medianías. La preocupación del ayuntamiento es “evitar una escalada de caravanas, campistas o fiestas irregulares que pudieran contravenir las recomendaciones sanitarias en vigor esta Semana Santa”.
Por ello, el alcalde firmó el bando en el que recordó la “prohibición de acampar en tiendas de campaña o en vehículos en el litoral y medio natural de Arico”, y desde el área de Seguridad, coordinada por Andrés Martínez, se ha establecido un dispositivo especial de seguridad de la Policía Local en coordinación con Protección Civil, al cual se pretende sumar a la Guardia Civil, la Policía Canaria y agentes de Costas y de Medio Ambiente.
Sebastián Martín hace un llamamiento a los visitantes procedentes de otros municipios “a disfrutar de la gastronomía y de los paisajes de Arico, pero con respeto y control”.
