En una sesión ordinaria que volvió a evidenciar la situación de inferioridad en la que se encuentra el alcalde, José Julián Mena, el Pleno acordó ayer recuperar las competencias que delegó a la Junta de Gobierno Local el 1 de julio de 2019. Con ello, incrementa su poder de decisión en la gestión municipal en detrimento del gobierno local y de Mena como miembros únicos de dicho órgano. Esta propuesta contó con el apoyo de los concejales de Coalición Canaria (CC), Partido Popular (PP), Ciudadanos por Arona (CxA), Sí Podemos Arona, Ciudadanos (Cs), el edil no adscrito, Luis García, y seis concejales del PSOE, que conforman una mayoría absoluta frente al regidor y los seis representantes del PSOE que secundan al alcalde.

José Ramón Rodríguez, portavoz nacionalista, alude a la situación de “minoría absoluta” del gobierno municipal, “que tiene paralizado el Ayuntamiento de Arona”, para poner en valor el hecho de que la medida “favorece la participación, el debate y la toma de decisiones en asuntos importantes”. Aspectos en los que incidió su homóloga del PP, Águeda Fumero, quien vuelve a emplear la expresión “minoría absoluta” para definir la situación política de José Julián Mena y su gobierno. “Es bueno que el Pleno marque las pautas con las que se debe desarrollar el municipio”, reflexión que completó explicando que la recuperación de competencias permitirá terminar con “el atropello a nuestros derechos fundamentales a la hora de garantizar nuestra participación”. Antonella Aliotti, representante de Sí Podemos Arona, se alinea con el resto de la oposición y defiende que lo aprobado anoche “es un ejercicio de transparencia que solo puede beneficiar a la ciudadanía”.

Aunque el portavoz del PSOE afín al alcalde, Leopoldo Díaz, dijo compartir “parte del discurso” de la oposición y evaluó como positivo el hecho de que se producirá un mayor reparto de la responsabilidad en la toma de decisiones en los asuntos que, hasta ahora, competían a la Junta e Gobierno Local, el voto de los miembros del Grupo Municipal Socialista que secundan a Mena fue contrario, porque el retorno de las competencias al Pleno “ralentizará muchos procedimientos que necesitan celeridad. Esto no es aconsejable en estos momentos”.

Ocho son las cuestiones sobre las que, a partir de ahora, el Pleno es el órgano competente para decidir: resolución de los procedimientos sancionadores en materia de actividades clasificadas; contratación de obras, suministro, servicios, gestión de servicios públicos, contratos administrativos especiales y los privados cuando su importe supere el 10% de los recursos ordinarios del presupuesto o la cuantía de seis millones de euros; adjudicación de concesiones sobre los bienes de la entidad y la adquisición de bienes inmuebles; aprobación de los proyectos de obra y servicios cuando sea competente para su contratación o concesión; expedientes de responsabilidad patrimonial; el ejercicio de acciones judiciales y administrativas en materia de competencia plenaria y la declaración de lesividad de los actos del Ayuntamiento.

Reprobado por tercera vez

Retirado del orden del día el asunto de Los Llanos de Chayofa por su reiteración y en aplicación de la norma –ya fue rechazado por el pleno el año pasado–, Mena y el PSOE que le apoya solo ganó ayer en las cuatro declaraciones institucionales abordadas, así como en la propuesta planteada por el concejal no adscrito en apoyo al sector del taxi, asuntos en los que hubo unanimidad. Los restantes temas tuvieron el mismo cómputo: siete votos por un lado (el alcalde y los suyos) y 18 por el otro (el resto de la Corporación). Lo mismo sucedió con la tercera reprobación del mandato. Esta vez CC lo hizo por el incumplimiento de muchos acuerdos plenarios (Águeda Fumero citó algunos de septiembre y octubre de 2015), como un toque de atención y para que “se lo tome en serio y se ponga las pilas”. Esta “crítica constructiva”, en palabras del portavoz socialista, Leopoldo Díaz, tendrá respuesta en la Comisión de Seguimiento porque “estamos trabajando para recopilar las mociones (aún por ejecutar), que son un montón”.

Al final, Mena fue reprobado mientras José Ramón Rodríguez le decía que “pasará a la historia por ser el alcalde con más reprobaciones” y Leopoldo Díaz volvía la oración por pasiva: “Esta oposición pasará a la historia como la de las reprobaciones gratuitas”.

Servicios Sociales

Las discrepancias aumentaron a la hora de abordar la situación de los Servicios Sociales, con escasez de personal en el área, más de 500 solicitudes de Prestación Canaria de Inserción (PCI) por tramitar y una falta de implicación del alcalde en la resolución de los problemas del Patronato Municipal. Reproches que surgieron de casi todos los grupos de la oposición, especialmente de CC y PP. En algo coincidieron ambos bandos, en reconocer el trabajo y el esfuerzo de los trabajadores del departamento. “Es de vergüenza que haya colas en las UTS, como la del Fraile. Es un escándalo. En Arona debe ser la prioridad atender a las familias más vulnerables”, dijo Rodríguez, que pidió “priorizar la contratación de personal y la ayuda a las familias”, mientras Fumero enmendaba a su colega solicitando solicitando un plan de mejora y la simplificación de los procedimientos. “La situación es muy preocupante, hay ausencia de liderazgo en un área tan sensible y No estamos dando respuesta rápida y eficiente”.

Raquel García, concejala de Hacienda, explicó que en Servicios Sociales se gastó un 14% más el año pasado que en 2019, pasando de 1.020.000 euros a 3,6 millones la partida de emergencia social y gastando el 92% de la misma, aunque se gestionó el 97%. El presupuesto del Patronato comenzó con 4,9 millones y se suplementó hasta los 8,9 millones, siendo los gastos de 8,5 millones. “Se dejó de gastar 417.000 euros, el 0,5% de los ingresos)”, aclaró.

Es decir, la cuantía equivalente al personal no contratado, adujo Elena Cabello, responsable del Patronato, para la que en el último años el área solo ha tenido “ayuditas paliativas” en materia de personal (escasez), pero criticó que “no se aplica una movilidad temporal de empleados para gestionar los expedientes pendientes”, y aseguró desconocer las medidas urgentes que se proyectan por el gobierno local, del que todavía forma parte, pero contra Mena.