La familia Torres mantiene su apuesta por las energías renovables y considera una oportunidad vincularla a la posibilidad de optar a fondos de la Unión Europea. Con Canarias y Tenerife como marco, tal y como explican en un encuentro virtual con los medios de comunicación del Archipiélago, Miguel A. Torres, presidente del grupo, y Josep María Ribas, director de Cambio Climático. Como ejemplo ponen el almacén de la compañía Excelsia Canarias en el Polígono Industrial de Güímar que se abastecerá al cien por cien de energía fotovoltaica gracias a 440 plazas solares con 198 kilovatios/hora de producción. Torres valora la posibilidad de que en apenas una década Canaria pueda “convertirse en un destino por completo verde”.

El objetivo del foro virtual era dar a conocer que Familia Torres ha presentado una Manifestación de Interés (MDI) al Ministerio para la Transición Ecológica para llevar a cabo un proyecto de energía fotovoltaica en Tenerife. Con fondos europeos y dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. Este proyecto, que se enmarca en el programa de impulso de las energías sostenibles en las Islas, contempla la instalación de las placas solares de autoconsumo en la cubierta del almacén de Excelsia, ubicado en el término municipal de Arafo. Contará con baterías de litio para almacenar la electricidad no consumida de forma instantánea. Incluso se plantea la posibilidad de abastecer de energía a las zonas más cercanas.

Apoyo al proyecto.

Varias asociaciones y grupos empresariales, entre los que se encuentran la Asociación Canaria de Energías Renovables (Acer), Ashotel e IGS Ingenieros han dado su apoyo al este proyecto mediante cartas de adhesión. Según Miguel A. Torres, “ahora, con la disponibilidad de estos fondos europeos, hay una gran oportunidad para que las empresas puedan implementar proyectos de energías renovables y contribuir a combatir la emergencia climática”. En este sentido apunta que “hasta mayo hay tiempo de seguir sumando adhesiones para ser más fuertes ante la Unión Europea”. La familia Torres enmarca esta iniciativa en el potencial de Canarias “para convertirse en un destino verde, reduciendo su dependencia del petróleo” que actualmente es enorme. Para Miguel A. Torres sería “un sueño personal cumplido”. Además, incide en que “los turistas están cada vez más comprometidos con la sostenibilidad y empieza un movimiento en países del norte de Europa en contra de los desplazamientos en avión por las emisiones de CO2 que producen”. Considera Torres que “Tenerife y Canarias pueden contrarrestar esta tendencia si se muestran como un destino que apuesta por las energías renovables”. Estas son uno de los principales ejes del programa ambiental Torres & Earth, gracias al cual han reducido en un 30% sus emisiones de CO2 directas e indirectas del 2008 al 2019. Desde 2012 han invertido en este ámbito unos 16 millones de euros. De la biomasa a los coches eléctricos. Su objetivo es llegar a una reducción del 55% de su huella de carbono en 2030. Y siempre garantizando la calidad del vino.

“Hasta mayo hay tiempo de sumarse a este proyecto y ser más fuertes ante la UE”

MIGUEL A. TORRES - Presidente de Familia Torres

Jornadas como precedente.

Según el presidente Torres, hay interés en las Islas por llevar a cabo proyectos de energías renovables, tal como se demostró en las jornadas sobre autoconsumo fotovoltaico dirigidas al sector hotelero que organizaron junto a la Unión Española Fotovoltaica tanto en Gran Canaria como en Tenerife en febrero del 2020. El presidente y el director Ribas valoran mucho ese encuentro. Miguel A. Torres también menciona su viaje a El Hierro que le impresionó “al poder comprobar que el 70% de la energía de la Isla procede de renovables, en este caso de la eólica”.

Tradición vitícola.

Arraigada en la tradición vitícola catalana desde el siglo XVI, la Familia Torres fundó su bodega en Vilafranca del Penedès en 1870, hace 150 años. De padres a hijos se ha transmitido la pasión por la cultura del vino desde el respeto por la tierra y la tradición, y la apuesta por la innovación. La quinta generación se focaliza en la elaboración a partir de viñedos singulares y fincas históricas, así como en la recuperación de variedades ancestrales. La lucha contra la emergencia climática es, desde 2008, uno de sus ejes de actuación mediante acciones de adaptación y mitigación para reducir emisiones de CO2. Es miembro de las Primum Familiae Vini, que integra a doce de las familias centenarias elaboradoras de vino más prestigiosas, y fundadora de International Wineries for Climate Action, que impulsa la descarbonización del sector.

En Tenerife, el uso de las energías limpias podría suponer una oportunidad para combatir el cambio climático y al mismo tiempo captar turistas cada vez más concienciados con la protección del medio ambiente. Apuesta y filosofía de Torres.