El vicepresidente primero del Cabildo de Tenerife y consejero del área de Carreteras y Movilidad, Enrique Arriaga (Cs), confirmó ayer a EL DÍA que la apertura de la TF-5 se adelanta a la tarde de hoy, debido a la buena evolución de los trabajos que han permitido la retirada de las rocas inestables del talud que amenazaban la seguridad de los usuarios de la vía, a la altura de la gasolinera El Mirador, en Los Realejos.

Arriaga considera “un éxito” que los trabajos previstos por el Cabildo de Tenerife terminen tres días antes de lo previsto inicialmente. “No hemos encontrado ninguna sorpresa importante oculta, cosa que es muy habitual cuando se trabaja en una talud de estas características, y eso nos ha permitido completar el trabajo con muchísima rapidez”, subraya.

El responsable de las carreteras insulares de Tenerife mostró una doble satisfacción: “Primero porque se demuestra que la campaña de vigilancia de taludes ha funcionado al detectar el riesgo y, segundo, porque hemos actuado bien y rápido en la zona, donde se han retirado las piedras inestables entre el fin de semana y los dos días de puente. Hemos logrado causar las menores molestias posibles para que, a partir de mañana, cuando se retome la actividad escolar y laboral, la vía esté abierta con normalidad”.

El consejero de Carreteras considera “un éxito” que los trabajos acaben 3 días antes de lo previsto

Arriaga pone en valor el trabajo realizado, pero también reconoce que el riesgo en los taludes no desaparece por completo: “Hemos realizado un estudio de ese talud y hemos actuado, lo que ocurre es que una ladera es un elemento vivo, que evoluciona en función de las lluvias, el viento, la vegetación... Y la vigilancia debe ser constante y eso es lo que estamos haciendo en esta zona de la TF-5 y en otras de la isla”.

“La inspección es continua y, de hecho, este año hemos aumentado un 20% el presupuesto de mantenimiento y conservación de carreteras, donde se incluyen esas inspecciones. Hay dos millones de euros más presupuestados, se pasa de 8 a 10 millones porque tenemos clarísimo lo importante que es el mantenimiento de nuestras carreteras”, remarca el vicepresidente.

El director insular de Carreteras, Tomás Félix García, detalla que durante cada uno de los tres primeros días de trabajo en la zona se han retirado “entre dos y tres camiones” con rocas desprendidas a mano por los operarios, que trabajan colgados con arneses y cuerdas en el talud. Arriaga añade que “cuando se suelta una roca, al llegar abajo ya no sólo cae esa piedra, son como 32 más porque va arrastrando con todo lo que se encuentra suelto”.

Está previsto que durante el día de hoy se duplique el número de trabajadores para concluir las tareas pendientes y poder abrir la vía por la tarde. En la jornada de mañana se prevé lluvia y tampoco hubiera sido seguro trabajar en el talud, lo que animó al Cabildo y a las dos empresas implicadas a “acelerar el ritmo de trabajo al máximo”, según García.

Se han retirado entre dos y tres camiones diarios de rocas desprendidas a mano de la ladera

Para el director insular, “ha ido todo bastante bien y la conclusión que sacamos es que se acertó al actuar con tanta rapidez. Si no hubiera sido así, nadie puede garantizar que no hubiera pasado nada en estos días”. El trabajo continuará en la zona porque es necesario seguir analizando de forma continua éste y otros taludes.

Aunque se produjeron algunos atascos en las zonas de desvíos, en Los Realejos y La Guancha, la coincidencia con un fin de semana y un día festivo redujo los problemas respecto a cortes anteriores. “El tráfico ha sido el esperado, pero también se produjeron colas por la presencia de algún ciclista inconsciente que se saltó la prohibición de circular por la carretera de Icod el Alto”, lamenta García.

“Hay que felicitar a las dos empresas porque un operativo de este tipo lleva muchísimo trabajo detrás que la gente no conoce. Simplemente montar y desmontar todos los días los desvíos en Los Realejos y en La Guancha supone un gran esfuerzo. Se tarda alrededor de dos horas cada día entre el montaje y desmontaje. No se trata de poner una señal para cortar una autopista y marcharse, sólo en el caso de Los Realejos hay que colocar desde un vehículo más de un kilómetro de conos. Es algo bastante laborioso”, concluye el director insular.