¿Cómo llegó usted a la política? ¿le viene de familia?

Sí, se puede decir que a mí la política y el socialismo me vienen de cuna. A mi padre, Manolo Domínguez, lo recuerdo desde muy pequeño participando siempre en la vida política de este municipio en los años 80 y 90. Fue concejal y él es mi gran referente. En mi casa viví tanto su etapa de gobierno como cuando pasó a la oposición, ya en los mandatos de Manuel Reyes. He vivido momentos políticos muy duros en este pueblo, pero de él aprendí a vivir la política municipal y los valores socialistas. Soy producto de esa realidad que viví. Empecé a militar en el PSOE en 1999, cuando incluso formé parte de la lista de Pilar Rodríguez. Tras un paréntesis, en 2003 regresé a la actividad orgánica y fui secretario de organización y secretario general del PSOE en San Juan de la Rambla. En 2007 no pude ir en la lista con Fidela Velázquez por cuestiones profesionales, ya que acababa de poner en marcha una empresa, pero sí estuve en 2011 y desde entonces soy concejal y portavoz municipal. Ganamos las elecciones de 2011, pero nos cortaron la trayectoria con la lamentable moción de censura de 2013. En 2015 volvimos a ganar las elecciones y fuimos capaces de llevar un gobierno en minoría durante cuatro años. En esa etapa aprendimos a establecer líneas de acuerdo y de consenso que han continuado en 2019, tras una nueva victoria electoral de Fidela. En este mandato abogamos por el Pacto de la Concordia, que no se pudo concretar desde junio de 2019, pero sí se hizo realidad en el verano de 2020.

¿Aún compatibiliza su trabajo como docente con la política?

Sí, en todos estos años de trabajo en el Ayuntamiento, sólo he estado liberado entre 2011 y 2013, y entre enero y julio de 2020. Durante siete años he combinado mi trabajo como profesor de informática en el IES San Miguel con la actividad política. Ha sido un esfuerzo personal y profesional combinar mis clases en el Sur con el Ayuntamiento de San Juan de la Rambla. Ahora mismo, aún siendo alcalde accidental, sigo igual. Espero y deseo que, cuando se confirme mi elección, pueda estar liberado al 100% para poder dedicarme plenamente a la Alcaldía.

¿En algún momento del pasado se imaginó que llegaría a ser alcalde de su pueblo?

Voy a ser muy sincero. Cuando uno se dedica a la política siempre aspira a cosas. Quizás pensé que en algún momento del futuro, si mis compañeros querían, podía llegar a ser el candidato. Pero la verdad es que no esperaba que llegara este momento ahora ni lo deseaba así. Fidela Velázquez es mi amiga, es mi compañera y es la líder del proyecto socialista. Eso es así. Yo he estado siempre a su lado. Me apena mucho la situación actual. No puedo celebrar que haya llegado a ocupar así la Alcaldía la mayor responsabilidad y el mayor orgullo para un ramblero. Llegar así, a través de una sentencia injusta y desproporcionada que inhabilitó a Fidela, es lo más triste que he vivido en política. No es nada bonito, aunque agradezco a mis compañeros en el PSOE que hayan apostado por mí, y también agradezco el apoyo de nuestros socios de AIS-CC.

¿Se siente preparado?

Sí, me siento preparado porque ya tengo un recorrido. He sido portavoz municipal; he llevado áreas delegadas de mucho peso y muchos proyectos importantes; conozco la administración, y conozco muy bien mi pueblo. Creo que doy el perfil. El reto de ser alcalde justo en el momento más complicado, con esta crisis económica, social y sanitaria es grande. Somos un ayuntamiento pequeño, con recursos mínimos, con apenas 4 millones de euros de presupuesto. Será difícil, pero me encuentro preparado para afrontar este reto y dar continuidad al gobierno. Espero y deseo estar a la altura de las demandas de mis vecinos y vecinas.

¿La puerta para que AUP-SSP vuelva al grupo de gobierno está cerrada?

La puerta no está cerrada, pero ellos decidieron marcharse en un momento en el que se les pidió y rogó que colaboraran en un tránsito pausado y calmado. Las cosas no se podían cerrar de un día para otro. Justo cuando se les pidió saber estar y compostura, se marcharon. Hemos vivido momentos durísimos en este mes y medio, y otros se han marchado. En la vida no se sabe lo que puede pasar, pero el gobierno de continuidad es el que acabamos de presentar con los concejales de PSOE y AIS-CC.

Para un socialista ramblero debe sorprender que el apoyo para su gobierno salga de AIS-CC, su gran rival histórico...

Supone un gran cambio. En este mandato existió un gran debate sobre los posibles pactos. Yo fui uno de los que defendía inicialmente el acuerdo con AUP-SSP, pero después de vivir estos momentos tan complicados y duros, valoro mucho el apoyo, el saber estar y la tranquilidad de AIS-CC, que ha remado con nosotros. En el PSOE estamos muy agradecidos de que AIS-CC no entrara en el juego de desestabilizar. Juan Sivero (AUP-SSP) me llamó tras el pleno del día 9 para conocer nuestra postura, pero le dije que eso tendrá que hablarlo ahora con los interlocutores del PSOE.

¿Cuáles son sus prioridades?

Lo más importante para nosotros será dar continuidad a todo el trabajo que estaba en marcha hasta 2023, tal y como se planteó en la rueda de prensa de los proyectos en ejecución o planificados. Además, queremos mantener la estabilidad institucional y escuchar a todo el mundo, sin mirar colores políticos. Pero evidentemente, en la situación actual, las prioridades serán la atención social y los planes de empleo.

¿Entiende que Fidela Velázquez hizo lo correcto al no dimitir inmediatamente?

Sí, claro. Fidela era la alcaldesa y, como cualquier persona responsable entiende, no podía marcharse del Ayuntamiento al día siguiente de conocerse la sentencia. El proceder de Fidela ha sido un gran acto de responsabilidad hacia el consistorio y hacia sus vecinos. Ha hecho posible una transición ordenada, organizada y tranquila. Pese a los ataques y las críticas, ha actuado de forma responsable. De un día para otro no se podía marchar. Habrá que replantearse si algunas leyes, que dejan a los dirigentes públicos a los pies de los caballos, deben cambiarse.