El presupuesto del Ayuntamiento de El Rosario para 2021 será de 16,5 millones de euros, lo que supone una reducción del 4,67% con respecto a este año (807.591 euros). Las nuevas cuentas fueron aprobadas ayer en una sesión plenaria de carácter extraordinario con los votos a favor del pacto local (IR-Verdes y SSP) y el rechazo del Partido Socialista (PSOE), Coalición Canaria (CC), el Partido Popular (PP) y Podemos.
La cita, que arrancó con un minuto de silencio por las víctimas de la violencia de género, volvió a estar marcada por los ya habituales choques entre el gobierno y la oposición. “Este es el presupuesto de la recuperación, a pesar de que, por primera vez en cinco años, las cuentas municipales bajan”, sostuvo la concejala de Hacienda, Sara Cabello, al principio de la intervención en la que presentó las nuevas cuentas. Concretamente, estas se sitúan en 16.481.490 euros, lo que supone una disminución de 807.591 euros –un 4,67% en términos relativos– con respecto a las de 2020.
En inversiones hay 824.000 euros para iniciar la redacción del PGO, entre otras partidas
La también primera teniente de alcalde indicó que la “aminoración” responde “fundamentalmente” a la disminución en la previsión de ingresos procedentes del bloque de financiación canario del Régimen Económico y Fiscal (REF) ante la crisis derivada de la pandemia. Además, Cabello defendió que la bajada en comparación al anterior ejercicio será reducida gracias a “una gestión tributaria más efectiva, que permitirá tener una mayor recaudación sin aumentar la presión fiscal de los vecinos, sino mediante la actualización de hechos imponibles que hasta ahora no se estaban tributando como deberían”. Se refería a la actualización de los padrones de vados y alcantarillado. También puso de relieve la congelación de impuestos y tasas.
En su recorrido por los capítulos de ingresos y gastos, subrayó el aumento en el gasto social para combatir las desigualdades que genera la crisis económica, en torno a 55.000 euros más que en el actual presupuesto; la subida de un 2% en el capítulo de gastos de personal para dotar de cinco nuevas plazas a la Policía Local, y las inversiones. Ya con la vista en 2022, expuso que se pondrá en marcha una nueva página web de participación ciudadana.
La reserva de 80.000 euros para la reforma del camino La Cañada, otro de los puntos destacados
La alocución de Sara Cabello fue la antesala de la bronca. Primero, con unas enmiendas a la totalidad y parciales que habían formulado desde la oposición y que el alcalde, Escolástico Gil (IR-Verdes), lamentó que fueron presentadas a última hora, y en adelante con las intervenciones. El primero en tomar la palabra fue el portavoz del PSOE, José Antonio Estévez, que dijo que son los “presupuestos de la tributación”, y lamentó que se hayan gastado 30.000 euros en ayudas a autónomos y 37.000 en alquiler de luces navideñas. “Este presupuesto no se acerca a la realidad de los vecinos de El Rosario”, manifestó, antes de asegurar que un vecino le dijo que Cabello era “la Ana Lupe 2.0”, en referencia a la exconcejala Ana Lupe Mora.
Pedro Trujillo (CC) consideró que las cuentas no había “por dónde cogerlas” y que son “más de lo mismo”, y Juan Carlos Martínez (PP) criticó el escaso tiempo que tuvo la oposición para analizarlas, y estableció un parangón entre las formas del actual gobierno y el anterior. A continuación, mostró su enfado por que el gobierno se haya gastado “casi 800.000 euros en fiestas sin haber fiestas”. Concepción Moreno (Podemos) propuso rehacer el documento y Juan Carlos Martín (Cs), que no estuvo en el pleno, calificó en una nota los presupuestos como “los más retrógrados” que han visto.
Choque por el ambulatorio
Sara Cabello criticó en su segundo turno que la oposición “ha trabajado arduamente para que el Cabildo no ayudara a financiar el desastre medioambiental de la costa”. En respuesta, Estévez lo negó y resaltó el apoyo del Gobierno de Canarias y puso el ejemplo de la reciente visita a El Rosario de su vicepresidente, Román Rodríguez (NC), que se comprometió a desbloquear la construcción del centro de salud de La Esperanza. A continuación, el portavoz e los socialistas rosarieros lanzó una advertencia: “Le quiero recomendar algo: una cosa es tener las perras, que ya las tiene, y otra es que habrá que sentarse con la gente que gestiona esas perras”. La respuesta del alcalde fue inmediata: “¿Está amenazando usted con que su partido [responsable de la Consejería de Sanidad] no va a hacer un centro de salud que se ha aprobado en el presupuesto de la Comunidad Autónoma”.
