Con el voto favorable de la mayoría del Pleno, compuesta por Coalición Canaria, Primero Arico y Partido Popular, el consistorio dio ayer el primer paso para abordar lo que el grupo de gobierno ha denominado borrón y cuenta nueva, un reconocimiento extrajudicial de crédito que permitirá el abono de las facturas pendientes hasta diciembre de 2019, con un valor total que asciende a 984.123,75 euros.

El PSOE se abstuvo tras un debate en el que el edil de Economía y Hacienda, Víctor García (Primero Arico), separó la modificación presupuestaria de la moción de censura.