El alcalde de Buenavista del Norte, Antonio González Fortes (SSP), lamenta que el problema de las cabras asilvestradas en el Parque Rural de Teno continúe sin solución y alerta de que estos animales causan daños a la flora autóctona y a la actividad ganadera, además de ser causantes de desprendimientos que suponen un grave riesgo que impide, por el momento, la reapertura del sendero del barranco de Masca.

González tiene claro que el área de Medio Ambiente del Cabildo de Tenerife debería continuar con el programa de control de especies invasoras que se desarrollaba en la isla: "Las apañadas, que en esta zona se conocen como trincar cabras, tienen una utilidad muy limitada. Hay muchas zonas inaccesibles y no se puede poner en grave riesgo a personas expertas para que traten de atrapar a animales que en algunos casos son muy grandes y tienen muchísima fuerza".

"Cuando se va a trincar cabras la realidad es que la mayoría no se pueden coger y, según los últimos cálculos oficiales, en Teno hay unas 200 cabras asilvestradas", advierte el mandatario.

La última actuación que el área de Medio Ambiente del Cabildo de Tenerife comunicó al ayuntamiento es la intención de cerrar los pasos que tradicionalmente se usaban para mantener a este ganado fuera o dentro del barranco de Masca. "Cuando esos pasos se bloqueen, quedarán cabras dentro del barranco y, según el plan de seguridad, eliminarlas de la zona es una condición clave para poder abrir ese sendero. No sabemos si piensan trincarlas o abatirlas", reconoce González.

"Seguimos igual que en noviembre de 2019 y lo único que sabemos es que no se han producido nuevas batidas para abatir cabras", subraya el mandatario.

"La postura de nuestro gobierno es la misma de siempre: apoyo al trabajo que realizaba Medio Ambiente para el control de especies invasoras que causan daño a la flora, además de otros riesgos de seguridad y afecciones a las explotaciones ganaderas -insiste Antonio González-. Esos animales asilvestrados, en concreto los machos, alteran los ciclos de cría y de producción de leche y están generando muchos problemas a los ganaderos, que ya están resignados y piensan que al final no se va a hacer nada al respecto".

El alcalde de Buenavista del Norte tiene claro que el problema debe solucionarse "por cuestiones medioambientales, de seguridad y también económicas", en alusión a la actividad ganadera, y no esconde que en algunos casos se pueden necesitar soluciones drásticas: "Si no se pueden capturar, en casos extremos habrá que abatirlas".