La Fundación Telesforo Bravo Juan Coello llama la atención sobre el estado en que se encuentra la reserva natural especial del Malpaís de Güímar en su límite con El Puertito de Güímar. La intervención humana genera una afección que lleva al colectivo a señalar que "este espacio protegido de un gran valor ambiental no merece ser nuestro basurero".

En el marco del Proyecto Libera de Seo/BirdLife y Ecoembes, un grupo de 17 personas originarias de Canarias, Finlandia, Alemania, Francia y Argentina llevó a cabo una acción de limpieza en el Malpaís. Estos "simpatizantes y colaboradores" del Club Deportivo Aguavenque de Güímar, de la Fundación Telesforo Bravo y quienes se sumaron a título particular intervino en el ámbito de la reserva, separándose en dos grupos desde Cho Regino, para cumplir con la normativa y con la autorización otorgada por el Cabildo, que establece un grupo máximo de 15 personas.

Los residuos que retiraron no solo fueron extraídos del espacio natural, "sino que nos dirigimos hacia el límite del Puertito de Güímar, amenazado por un plan de urbanización carente de sentido ya que los valores naturales que motivaron la declaración de la reserva también están presentes en esta zona".

Al final fueron 250 kilos de basura que llenaron un contenedor "y constatamos que hay ámbitos donde no dominan los componentes naturales, sino los tecnofósiles, esa capa formada por residuos de origen humano que se mezclan con rocas y restos vegetales". Allí había excrementos de perros mezclados con restos de papel de aluminio, una tarrina pequeña de mantequilla que se desintegraba al tacto convirtiéndose en microplásticos, vidrios de botella muy fragmentados, un tapón de la botella, además de toallitas relativamente enteras. "Ese es el triste legado que el ser humano está dejando sobre este planeta y que servirá para que los arqueólogos del futuro expliquen el colapso de la civilización en la que vivimos", explica la Fundación.

Detrás del muro que delimita el Malpaís de los edificios del Puertito "hay quien se ha dedicado a depositar neveras utilizadas en la hostelería, botes de pintura y gran cantidad de basura de todo tipo". Entre otros materiales encontrados, citan una jaula para gallinas abandonada "y una zona donde había gran cantidad de bolsos vacíos, sin ninguna documentación u objetos que permitieran identificar a sus propietarios y que pudieron ser el botín de ladrones", así como muchos escombros.

El Malpaís de Güímar ocupa 290 hectáreas, desde su límite con el Puertito de Güímar hasta el Camino de El Socorro, tal y como establece la Ley 12/1994, de 19 de diciembre, de Declaración de Espacios Naturales de Canarias.