A los trabajos de ampliación del cementerio municipal -con 142 nichos e incremento de la superficie de la cripta y sombreado exterior, entre otros-, ahora se suma la colocación de contenedores amarillos para mejorar la separación de los residuos.

Además, se dota al camposanto de regaderas comunes como medida que persigue reducir el uso de botellas de plástico. Asimismo, se dota al recinto de nuevas escaleras "que ofrecen una mayor seguridad para acceder a los nichos que se encuentren a mayor altura", y soportes para la elaboración de los ramos.

El consistorio coloca dispensadores de gel hidroalcohólico y cartelería sobre el Covid-19, para que el uso de estas herramientas, así como de las propias instalaciones, se haga con todas las garantías de higiene y seguridad.

El horario de verano del cementerio es de 8:00 a 19:00 horas de lunes a sábado, de 9:00 a 13:00 los domingos.